Una falsa concesionaria de autos ubicada en la calle Constitucion al 500 en la localidad de Merlo estafo al menos a 500 compradores.
Mediante una falsa firma titulada Multimarcas, ofrecía por la redes sociales autos usados. La modalidad era pedir un anticipo que variaba entre los $ 20000 a $ 100 000, con la promesa de financiar el resto del rodado en comadas cuotas y una entrega en 30 días.
El mismo vehículo era vendido a distintos compradores con la misma promesa. La familia, afincada en la propiedad donde se citaba a los compradores desde hace 30 años es de apellido Montiel, los herederos del fundador de la cadena de mueblerías Latinas, reconocidas en la década del 90, más tarde fusionada con Grupo Marquez. Cumplidos los plazos de entrega y al acercarse a reclamar los compradores fueron expulsados de la misma propiedad donde depositaron por barrabravas armados.
Los estafados, entre los que se encuentran remiseros, enfermeras, y quienes dieron adelantos por autos de alta gama se encuentran protestando frente a la importante finca que la familia utilizo para realizar la estafa. Los autos que ofrecían a la venta eran alquilados a la empresa Uber, y aseguraban tener la licencia de importantes concesionarias y marcas nacionales.
Las 500 personas estafadas piden la intervención de una Juzgado Federal a fin de dar con la detención de la familia Montiel. Jornadas de suma tensión se están viviendo en la esquina de Constitucion y Maipu. Quienes se acercaron en las jornadas previas a iniciar el reclamo cuentan que fueron amenazados de muerte y sacados a los empujones por la guardia de matones que tiene Montiel atrincherados en su domicilio. Vecinos del barrio cuentan que se ve a personar armadas rondando la propiedad cuando Montiel ingresa y exhiben armas de fuego en la vereda. La tensión va en aumento.
La propiedad fue varias veces apedreada cuando se detectó a Montiel y su familia comiendo un asado en el quincho con sus barrabravas mientras afuera ellos exigía la devolución de su dinero. Aseguran que no se irán hasta que hasta obtener una respuesta de la justicia y la restitución del importe desembolsado a la concesionara trucha. Ampliaremos.
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