En la inauguración de la Feria del Libro, el propietario de EL ANCASTI, Silvio Zitelli, donó una colección de libros de autores catamarqueños. Además, la Secretaría de Cultura distingió al diario por el 25° aniversario.
Se trata de un centenar y medio de libros y textos fundamentales de autores emblemáticos, tales como Samuel A. Lafone Quevedo, Adán Quiroga, padre Antonio Larrouy, Ezequiel Soria, Carlos Buenaventura Quiroga, Juan Alfonso Carrizo, Luis Franco, José Ramón Luna, Rafael Jijena Sánchez, Gustavo Gabriel Levene, Carlos Villafuerte, Juan Oscar Ponferrada, presbítero Ramón Rosa Olmos y Federico Emiliano Pais, entre otras destacadas figuras.
Al respecto, ell vicegobernador Mera sostuvo. “Esta donación nos llena de orgullo. Y por lo tanto agradezco al señor Silvio Zitelli y a su familia por habernos dado esta enorme satisfacción. La lectura es vida. ¡Vivan los libros y los lectores!”, concluyó.
La colección fue presentada por la Lic. Judith Moreno, de la UNCA, quien realizó un minucioso análisis de los textos y autores, destacó el valor de las primeras ediciones, “algunas de ellas inhallables”, según describió, y agradeció el aporte de Zitelli al patrimonio cultural de Catamarca y a los lectores. El texto completo de su alocución es el siguiente:
En una época tan particular, en la que lo aconsejable parece ser deslizarse apenas por las superficies, en la que pocos parecen aventurarse a la travesía de la lectura, una convocatoria como esta que nos reúne, en la mañana de hoy, a CELEBRAR LA PALABRA, LAS LETRAS, LA HISTORIA, en suma, A CELEBRAR LA CULTURA es, indudablemente, un acontecimiento auspicioso y saludable, que encuentra el marco propicio al realizarse aquí, en ámbitos de la 10° Feria Provincial del Libro.
A ello se agrega que, además, estamos hablando de la donación de un repertorio bibliográfico de relevancia. Resulta invaluable que su dueño, el Sr. Silvio Zitelli, quien con seguridad ha venido atesorando cada volumen en su colección personal, haya decidido compartir estas obras con la comunidad toda, al donarlas a la Biblioteca “ Dr. Mario Dardo Aguirre” del Senado de la provincia.
En efecto, la donación reúne una producción consistente, integrada por obras literarias, trabajos de investigación sobre temáticasque, a grandes líneas, abarcan disciplinas como: Historia, Historiografía, Arqueología, Antropología, Folklore, Literatura, Sociolingüística (o Dialectología), Geografía, Educación,Economíay, también,revistas.
Ante la emergencia de nuevos textos, resulta imprescindible poner de resalte la capacidad de las obras donadas para interpretar las identidades culturales de la provincia y, por ende, el trazado de su imagen histórica, cultural, religiosa, social. Construcción identitaria, su representación y testimonio en textos de géneros discursivos diversosy registros polifónicos como: poesía, prosa de ideas, estudios históricos, trabajos etnográficos,recopilaciones y estudios folklóricos, cantos, coplas, celebraciones,teatro, sermones, cartas pastorales, oraciones fúnebres, manifiestos; constituyen, desde nuestra perspectiva, los dos grandes centros de gravedad semánticos que atraviesan el conjunto, tomando particularmente en cuenta el pacto de lectura que estos textos proponen.
Es de textos que estamos hablando, de escrituras en las que se leen derroteros personales de hombres ilustres, como Fray Mamerto Esquiú o de personajes como Felipe Varela, caudillo cuya acción y pensamiento aún nos interpelan; estamos hablando de textos escritos por catamarqueños nacidos aquí en la provincia, aunque despuéshayan desarrollado lo más representativo de su obra fuera de ella.En este sentido, Pedro Luis Barcia sostiene: “es necesario que el escritor devenga en extrambientado. Se le impone tomar distancia, absorber otros aires y pasear por otros ámbitos” (“Hacia un concepto de la literatura regional”, en Videla de Rivero, G.; Castellino, M. (editoras) Literatura de las Regiones Argentinas, Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza, Argentina, 2004, 27); o por catamarqueños aquerenciados como don Samuel Lafone Quevedo, o el padre Antonio Larrouy, venido desde un pueblito cercano a Lourdes, Altos Pirineos, en Francia, o Federico Emiliano Pais, o por quienes habiendo nacido en otros lugares escribieron sobre Catamarca y sus figuras señeras.
A continuación, describiremos un recorrido muy sintético del contenido de lo recibido, sin seguir algún criterio en particular, sino solo atentiendo a los títulos que nos despiertan indisimuladasresonancias y por el alcance de su repercusión.
Alas y trinosen el Folklore de Catamarcade Carlos Villafuerte; el Cancionero de Catamarca de Juan Alfonso Carrizo; el estudio crítico del reconocido Delfín Leocadio Garasa sobre Julio Sánchez Gardel; una investigación antropológica, lingüística y etnográfica como La Cruz en América de Adán Quiroga, cuya primera edición de 1901, incluye el valioso prólogo de su contemporáneo, Samuel Lafone Quevedo; Política casera, comedia dramática de costumbres de Ezequiel Soria, escritor con quien nace el género dramático en las letras de Catamarca; de la producción de Carlos Buenaventura Quiroga, abarcadora en extensión y en variedad, pero centrada especialmente en la publicación de novelas, se destaca Cerro nativo, que abre el ciclo que denominamos “narraciones y motivos de la montaña andina” (Moreno, Judith de los Á., en Historia de las letras en Catamarca, vol. II, SFVC, 1993, 91), ciclo al que también pertenece otro título incluido en la donación, me refiero a La mulánima, poema mágico de la montaña; la prosa de ideas de Luis Franco, a través de títulos como:Walt Whitman,El otro Rosas, Biografía patria y Biografía sacra, verdaderas joyas de la prosa de Luis Franco, hoy prácticamente inhallables, al igual que la novela titulada: El fracaso de Juan Tobal, también de Franco;o el número homenaje de Aruman dedicado a Fray Mamerto Esquiú, publicación de la Dirección de Cultura de la provincia y que fuera durante muchos años el medio de dar a conocer las producciones de nuestros creadores e investigadores; de Ediciones Aruman también, Historia de la Cultura de Catamarca, o de Gaspar Guzmán- Ramón Rosa Olmos- y Gerardo Pérez Fuentes obra fuente y antecedente para quienes proyecten estudiar las letras, la historiografía, la educación, la medicina, la música, la arquitectura, las artes plásticas y el teatro, como también estudios geográficos, el peridismo, o lo que en el texto aparece denominado como Ciencias del Hombre, de Catamarca desde la Época Colonial hasta 1943;y, finalmente, los Documentos relativos a Nuestra Señora del Valle de Catamarca, compilados por el P. Antonio Larrouy, “preclaro conocedor de la Historiografía eclesiástica argentina”, al decir de Pérez Fuentes (en El historiador, P. Antonio Larrouy (1873-1935), 1991).
Esta presentación pública del contenido del patrimonio bibliográfico recibido en donación conlleva el propósito de empezar a producir ecos y respuestas en la comunidad para que, conociendo que las obras están, las consulten. De muchas de ellas, las ediciones primeras se encuentran agotadas y no reeditadas; de otras, solo se conservan desenvencijadas ediciones.
De hecho, un acervo bibliográfico como este permitirá tanto a la comunidad en general, como a estudiososde las diferentes temáticas acceder a fuentes primarias. De aquí en más, este reservorio se suma a otros ya existentes en las bibliotecas públicas y populares de la provincia.
Dejamos así presentadas –entonces- para el interés de los lectores y para fuente de consulta de estudiantes e investigadores estas obras objeto de tan valiosa donación. De esta manera, la Vice- Gobernación de la provincia, da formal recibimiento a las obras, a la par que público reconocimiento al Sr. Zitelli por su gesto enaltecedor.
En síntesis, felicitaciones a ambas partes y, en particular, a la Vice- Gobernación en el entendimiento (personal) de que mediante la difusión de inciativas como estas, su programa de gestión institucional, en relación con la Biblioteca del Senado “Dr. Mario Dardo Aguirre”, se propone la formación de públicos lectores curiosos e informados.
Distinción a EL ANCASTI
También en el acto inaugural del importante evento, la Secretaría de Cultura reconoció la trayectoria de distintas instituciones que este año cumplieron un aniversario significativo. Entre ellas estuvo EL ANCASTI, que recibió un diploma por sus Bodas de Plata y su aporte en la “construcción de la cultura”.
El reconocimiento fue entregado por la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Silvia Moreta, al director periodístico del diario, Marcelo Sosa. Junto al diploma, también recibió un ejemplar del libro “Inventario de Sabores, un viaje por la cocina tradicional de Belén”, escrito por María Florencia Ferre y Cecilia Pernasetti.
La ceremonia, que se llevó a cabo en el auditorium del Predio Ferial, estuvo encabezada por la gobernadora Lucía Corpacci, a quien acompañaron el vicegobernador Dalmacio Mera, el intendente Raúl Jalil y la secretaria de Cultura, Patricia Saseta.
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