¿Qué dijo el Tribunal de Trabajo de Junín? 

“No advertimos acreditado el carácter invocado por el señor Carreras. Esto es que ha sido elegido representante gremial de una asociación sindical inscripta con personería gremial”

Bien contundente. Salvo para el Intendente Mario Meoni que haciendo caso omiso (no creo que desconozca el tema) de la resolución, y del hecho de que la Delegada del Ministerio de Trabajo de Junín (Drá. Guillermón) fue desplazada por el desaguisado en cuestión, recibe a una delegación que no presenta sustento legal.

Algo más: Por las amenazas, Carreras tiene prohibido por la justicia acercarse a mi familia y a mi debido a una resolución dictada por el Juzgado (restricción que está en curso).

Con estos antecedentes y más el señor Carreras y su comitiva se sentó con el señor Intendente.

Gravísima impunidad institucional:

No quiero cansarlos repitiendo que por la causa APENOBA recibí disculpas del propio Ministro de Trabajo ya que la ilegalidad de lo actuado (no tienen papeles) llegaba a un punto inédito en los anales del Ministerio.

Sin embargo debo hacerlo porque ayer la Intendencia envió a todos los medios una foto (Carreras y compañía) donde dice que Mario Meoni se reunió con el titular de APENOBA para tratar temas relacionados a la problemática de los periodistas en la región.

Ahora bien, ¿cuáles son las razones que llevaron a Meoni a semejante reunión en un contexto donde la propia justicia dice otra cosa?

Dejo de lado la idea del desconocimiento porque, supongo (en la foto también aparece Javier Gabrielli), el Intendente no recibe a cualquiera sin revisar antecedentes ni estar al tanto de la situación. A partir de ahí las opciones se van reduciendo.

¿Intento de influenciar a la justicia juninense? No debe ser sencillo para los jueces, más allá de que operen con libertad, recibir este “baldazo de agua” en medio de un conflicto grave y complejo. El intendente borra con el codo lo que ellos escribieron con su pluma. ¿Esa es la nueva política que promueve Sergio Massa?

¿Pago de favores? No veo motivos para que una figura que pretende tener relevancia nacional haga una cosa así a menos que tenga algún tipo de “obligación” y se vea empujado a hacerlo por las circunstancias (¿Inconfesables?).

¿Temor? Si Carreras me amenazó a mí como figura en la causa, ¿pudo haber lo mismo con la máxima autoridad de Junín? Entonces estaríamos frente a un cobarde dado que debe denunciar este tipo de aprietes.

¿Quiso amedrentarme? Esta parece interesante ya que por ser un diario crítico del poder el Intendente pudo haber creído que con ese gesto me asustaba (Te equivocaste feo, Mario)

Como sea, que Mario Meoni tome posición y convalide la ilegalidad en medio de un proceso judicial donde está en juego nada más y nada menos que la libertad de prensa, es de extrema gravedad y genera múltiples sospechas. Por supuesto haremos las denuncias a los organismos nacionales e internacionales correspondientes ya que lo que está en juego es la libertad

El fantasma narco

Estas últimas semanas publiqué diversas notas donde se hablaba de una posible conexión de Pablo Carreras, hijo del ex convicto que se sentó con el Intendente (fue pirata del asfalto y pasó varios años preso) con el narcotráfico a gran escala, e incluso existirían escuchas donde también aparecería su padre.

Teniendo en cuenta que el narcotráfico es una realidad creciente en Junín y no puede darse sin apoyo de las autoridades, ¿existirá una conexión entre ambas cosas? De mínima resulta extraña esta reunión en un contexto tan caldeado.

“Dios escribe derecho sobre renglones torcidos”, afirma un dicho. Quizá todo esto habrá una puerta inesperada que podamos cruzar.

Una de cal, una de arena; justo ayer, un día triste para la libertad de prensa en Junín (otro más) recibí una nueva carta del Papa Francisco que me inspira a seguir en la lucha. Omar Bello

Denuncia penal del intendente

Ayer, medios afines a la intendencia aseguraron que Mario Meoni tenía intenciones de denunciarme penalmente por amenazas. Hace un mes atrás, uno de sus asesores me pidió por favor que ayudara al intendente a no quedar pegado al tema narcotráfico porque eso complicaba su proyección nacional. Mi respuesta fue que si no lo estaba no tenía por que preocuparse. Que el intendente de Junín me inicie una denuncia penal es otra prueba de que en esta ciudad hay gato encerrado y ese gato es de color blanco. Estoy cansado de las presiones, amedrentaciones y bestialidades generadas por un ejecutivo que solo piensa en quedar bien con Sergio Massa mientras descuida la ciudad, se reúne con delincuentes y genera acciones dudosas en especial hacia mi persona. Sin duda, la provocación de reunirse con un delincuente, estafador, coimero, que me amenazó de muerte, es una provocación cuyo objetivo es correrme de eje, alterarme y lograr que me vaya de la ciudad para que se puedan seguir desplegando no sólo el conjunto de atrocidades hacia la prensa, sino negocios como la Terminal, desquicios como el hecho de que Junín sea una de las ciudades con mas crímenes en el interior del país. Enfrentaré cualquier denuncia de este personaje oscuro que convirtió a Junin de una ciudad tranquila en uno de los polos más escandalosos, inseguros y corruptos del noroeste de Buenos Aires.

Tengo miedo de lo que puedan hacerme a mí o a mi familia. Estoy alterado, nervioso y trabajo con protección policial por denunciar a los narcos. De todas formas no me iré, señor Meoni. Tengo una misión que me dio el Papa y sus intenciones de crucificarme no me sorprenden.