Tras haber pasado casi 8 meses durmiendo en una comisión, ayer la Cámara de Diputados finalmente le dio media sanción a un proyecto de ley que busca establecer un régimen de tolerancia cero en controles de alcoholemia a conductores de vehículos.
El proyecto fue presentado el pasado mes de abril por el diputado José Giraudo, del bloque Mercedinos por el Cambio. Casi 8 meses después el proyecto finalmente llegó al recinto, principalmente gracias a que, en el orden nacional, se viene avanzando enormemente en la sanción de una ley que convierta la tolerancia cero en obligatoria para todo el país.
“Me hubiera gustado muchísimo que hubiéramos contado con esta ley en abril de este año. No se pudo, no se quiso, no se supo”, dijo el autor del proyecto, José Giraudo, quien destacó que se trata de “una ley que pretende tener un alto contenido social y generar un cambio cultural”.
Si bien el proyecto ya contaba con el apoyo del oficialismo provincial, no tenía el del radicalismo, lo cual condujo a un debate del tema de dos horas y media, encabezado por Walter Ceballos, quien proponía bajar el límite actual a 0,3 gramos de alcohol por litro de sangre, y por Fidel Haddad, para quien no se debería modificar la normativa actual.
Al respecto, Ceballos señaló el caso de Chile, donde se aprobó la tolerancia cero, pero luego se volvió atrás debido a los múltiples problemas legales que esa ley generó, como por ejemplo conductores interponiendo recursos de amparo en la Justicia, en base a que el margen de error reconocido de los alcoholímetros es de 0,042 gramos por litro.
“No hay que prohibir, hay que saber controlar. El valor 0,5 es absolutamente seguro, comprobado científicamente. Nadie ha traído la estadística de cuántos accidentes se han producido entre 0 y 0,5, porque no existe la estadística o no existe ninguno. Al que está por encima de 0,5 castíguenlo duramente, pero no cometamos la burrada de decir 'prohibamos, pongamos 0'. La gente se va a accidentar igual porque nadie controla. Acá en San Luis no se controla nada y de golpe vamos a ir a cero tolerancia”, señaló, por su parte, Haddad, con gran razón en lo que se refiere a los controles viales de esta provincia.
“Ni siquiera Suecia o Japón, que son líderes mundiales en seguridad vial, han tomado esa medida. Ya deben conocer las técnicas de medición, los errores propios de los alcoholímetros y demás cuestiones que hacen inviable esta medida. No es la comodidad que dice libre albedrío, ni tampoco la comodidad del legislador que dice 0. Sino, la del legislador inteligente que dice, ‘ a ver, ¿qué valor hay en la Ley Nacional? 0,5. ¿Qué valor hay en el 90% de los países? 0,5. ¿De dónde salió el 0,5? De un estudio científico’. Muy bien, el legislador inteligente va a decir, ‘voy a aceptar el rigor científico’”, añadió el diputado Haddad.
El debate también suscitó intervenciones de diputados de Compromiso Federal. “Hay que dictarla, aún a riesgo de que al implementación fracase por alguna razón”, dijo Luis Martínez, mientras que Gonzalo Estrada manifestó “esta es una ley severa”, pero necesaria para eliminar el flagelo de las muertes en accidentes de tránsito.
Volviendo al autor del proyecto, Giraudo desmintió a Haddad, señalando que el 44% de los países que integran la ONU tienen o se han comprometido a tener una ley de tolerancia cero. También señaló que, en Europa, los 3 países con mayor consumo de alcohol son Rumania, República Checa y Hungría, y que todos ellos tienen una ley de tolerancia cero. “O sea, hay un mito de que se va a ir en perjuicio de la industria vitivinícola”, dijo el diputado.
En cuanto al efecto perjudicial que esta ley podría tener en el turismo provincial, el diputado aseguró que en Córdoba, donde fue aprobada hace meses, no cerró ningún hotel ni se vio afectado el turismo en general, sino que se vieron beneficiados los taxistas.
Eventualmente, se llegó a la votación del proyecto, el cual fue aprobado por 30 votos positivos contra uno negativo de Haddad. Durante la votación, Ceballos trató de introducir varias modificaciones pero solo una fue aprobada, reduciendo el valor de las multas que se aplicarán si el Senado, después de sus 4 meses de vacaciones, convierte este proyecto en ley el año que viene.
Así es como se multará con una cifra entre 300 y 1.000 litros de nafta súper a quien sea descubierto manejando con un nivel de alcohol que vaya de 0,01 a 0,5 gramos de alcohol en sangre. Si el test da una cifra superior a 0,5, la multa irá de los 1.000 a los 3.000 litros de nafta súper. De ahí en más, cada vez que se reincida, cada multa duplicará a la anterior. Además, el juez que atienda la causa podrá condenar al infractor a trabajos comunitarios.
“Así se logre salvar una vida, esta ley estará justificada y tendrá su razón de ser”, concluyó Giraudo, sin poder ocultar su felicidad de que otro de sus proyectos haya sido aprobado.
Por último, cabe destacar que el proyecto no llegó a ser tratado por la Cámara de Senadores, por lo que la media sanción restante para convertirlo en ley podrá llegar, como muy temprana, en abril del año que viene, así que este podría ser el último verano en el que se pueda conducir con hasta 0,5 gramos de alcohol en sangre.
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