El gobernador Gildo Insfrán recibió este martes en su despacho del quinto piso de Casa de Gobierno, al medallista de oro Ezequiel Palacios, integrante de la selección argentina de Vóley que ganó los Juegos Panamericanos en Toronto recientemente. Acompañado por el subsecretario de Deportes de la provincia, Mario Romay, el joven de 22 años, llegó hasta Casa de Gobierno luego de mantener una conferencia con representantes de distintos medios de comunicación, interesados en entrevistarlo.

Muy cordial y tranquilo, el joven oriundo de Estanislao del Campo comentó que durante la charla con Insfrán, dialogaron sobre el torneo disputado, del que fue figura: “Es un momento raro, tener tantos elogios de todos lados, del gobernador más que nada es muy lindo” señaló.

“Con él (por el gobernador) hablamos de cómo fue el torneo, de cómo terminé en Toronto, una charla muy linda” destacó.

Sobre los Juegos Panamericanos, señaló que una vez ganada la final, “No tuvimos mucho tiempo para sacarnos fotos con la medalla, el partido más emotivo para mí fue contra Canadá, el pase a semifinales, se me cruzaron millones de imágenes, lloré dos o tres horas de corrido”.

Al hablar sobre los pilares de su carrera deportista, dijo que el técnico de la Unión de Formosa Martin López fue fundamental, y el equipo también, “me ayudaron muchísimo, Martin es un laburante, lo seguimos a él, nos guía muy bien”.

Dijo que ahora, “Quiero estar en mi casa unos días, disfrutar la medalla, el 7 de agosto volvemos a concentrar con la Selección, van a dar la lista para la Copa Japón, esperemos estar convocados de nuevo, el grupo está muy bien, no creo que haya muchos cambios en esta lista. La selección es día a día, entrenás uno o dos días mal y te cambian, hay otros jugadores esperando el puesto”.

En tanto, su madre Miriam señaló que “estamos orgullosos de nuestro hijo, el arrancó jugando en el colegio, en las horas de educación física, y luego siguió, ahora está donde está, a pesar de que lo que a él le gustaba el fútbol, era arquero. Cuando vino a Formosa sus técnicos lo alentaron muchísimo, él puso su granito de arena”.

“A los partidos los viví muy nerviosa, feliz de verlo, a veces uno sueña con algo así, pero llegar a la realidad es algo impresionante” destacó tras agradecer todas las muestras de cariño que recibió su hijo desde su llegada a la Terminal de Omnibus.