En los principales distritos de la primera y la tercera sección electoral bonaerense, las listas oficialistas quedaron en primer lugar; Posse perdió en San Isidro y el peronismo se imponía en Lanús
Javier Fuego Simondet
El resultado de las PASO de este domingo en el conurbano bonaerense dejó a la mayoría de los oficialismos en pie, con los intendentes o sus candidatos ubicándose en el primer lugar en el conteo municipal. No obstante, algunos distritos mostraron resultados de carácter histórico, como la derrota que sufrió la dinastía Posse en San Isidro.
El principal batacazo en el Gran Buenos Aires tenía lugar en San Isidro, distrito del norte del conurbano provincial que los Posse gobiernan desde 1983 (primero, Melchor Posse; y desde 1999, su hijo, Gustavo). La candidata oficialista, Macarena Posse, concejala e hija del intendente actual, perdió la interna de Juntos por el Cambio.
El vencedor en San Isidro dentro de Juntos por el Cambio fue Ramón Lanús, quien anudó una alianza con la fuerza vecinalista ConVocación por San Isidro que le reportó resultados. La lista de Lanús (actual concejal en el distrito) le sacaba en la madrugada unos 4000 votos de diferencia a la que encabezaba la hija del intendente. En el juego de lealtades de la interna opositora, Posse se alineó con Horacio Rodríguez Larreta, y Lanús, con Patricia Bullrich. Gustavo Posse fue el candidato a vicegobernador que acompañó a Diego Santilli en el binomio larretista.
Otro resultado con impacto se dio en Lanús, donde el peronismo era la fuerza más votada (presentó cuatro listas en su interna, que ganó el exsecretario de Justicia Julián Álvarez). Unión por la Patria sumaba alrededor de 39%, mientras que Juntos por el Cambio se ubicaba en el 34%. El ganador de la interna de la oposición fue Diego Kravetz, jefe de Gabinete municipal y candidato del intendente Néstor Grindetti. Juntos por el Cambio gobierna en Lanús desde 2015, cuando Grindetti (que ayer se quedaba con la candidatura a gobernador bonaerense desde la boleta de Bullrich) ganó el primero de sus dos mandatos. El distrito se conmocionó la semana pasada con el crimen de Morena Domínguez, de 11 años.
En un resultado muy ajustado, Ituzaingó vivió una derrota para la lista del intendente Alberto Descalzo, que gobierna el distrito de forma ininterrumpida desde su creación, en el año 1995. Juntos por el Cambio, con sus dos listas en competencia, se despegaba del peronismo solo por unos 800 votos. Unión por la Patria llevó como candidato a intendente a Pablo Descalzo, jefe de Gabinete municipal e hijo del intendente. El ganador de la interna de la oposición fue Gastón Di Castelnuovo, candidato alineado con Rodríguez Larreta.
En otras batallas cruciales, se impusieron los intendentes o las listas que ellos apadrinaron, salvo en contadas excepciones, como la de la elección en el municipio de Hurlingham.
En la primera sección electoral, Moreno fue uno de los distritos en los que hubo internas en el oficialismo. Se impuso la intendenta Mariel Fernández (Movimiento Evita), que le ganó la compulsa en Unión por la Patria al presidente de Trenes Argentinos, Damián Contreras (massista). Fernández se imponía este madrugada por unos 44.000 votos.
También San Martín fue sede de una interna de Unión por la Patria, entre el intendente Fernando Moreira (un alfil del ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis) y el diputado nacional Leonardo Grosso (Movimiento Evita). El peronismo quedó primero y el segundo lugar fue para La Libertad Avanza (su candidata local fue Andrea Vera), por lo que Juntos por el Cambio (llevaba tres listas) terminó relegado al tercer lugar en este distrito del oeste del Gran Buenos Aires.
En la tercera sección, que le aportó el mayor caudal de votos a Kicillof para que pudiera imponerse en la elección provincial, se sostuvo la intendenta local, Mayra Mendoza, referente de La Cámpora. Fue la candidata única de Unión por la Patria, que venció a Juntos por el Cambio por seis puntos, con más de 17.000 votos de ventaja por sobre las dos listas que presentó la principal alianza opositora (cuya interna ganó Martiniano Molina).
Lomas de Zamora, otro distrito clave del sur del conurbano bonaerense, se mantuvo con el peronismo como opción política más votada. Con 14 puntos de ventaja sobre Juntos por el Cambio (llevó dos listas) y el 90% de las mesas escrutadas, Unión por la Patria obtuvo el primer lugar, con Federico Otermín como candidato a intendente. Es un hombre de máxima confianza de Martín Insaurralde, quien se postuló como primer candidato a concejal. La interna de Juntos por el Cambio la ganó Guillermo Viñuales, quien fue mano derecha de Insaurralde, pero se apartó del oficialismo lomense en 2020, al renunciar a la jefatura de Gabinete local, y se postuló por primera vez a la intendencia en este turno electoral, enrolado en las filas de Larreta.
En algunos distritos, como Ezeiza y Berazategui, se reeditaron los triunfos de los apellidos que históricamente mandan en esas intendencias: Granados y Mussi.
En Ezeiza, el primer lugar quedó para Gastón Granados, hijo del intendente Alejandro Granados, que por primera vez desde 1995 no se postuló para seguir en el cargo. El segundo puesto en ese distrito fue para La Libertad Avanza (Pablo Daniel López fue el candidato) y Juntos por el cambio fue tercero.
En Berazategui, Juan José Mussi quedó encaminado hacia un nuevo mandato (que sería su sexto consecutivo). Era otro de los distritos en los que la fuerza de Javier Milei quedaba segunda (Benito Mario Molver fue el candidato).
En Tres de Febrero, el intendente Diego Valenzuela ganó su interna y fue el más votado individualmente. Juntos por el Cambio aventajó por 14 puntos a Unión por la Patria.
En Merlo, ganó el intendente Gustavo Menéndez, con 31%. Segundo quedó el candidato de Milei (Eduardo Varela). El exintendente Raúl “Vasco” Othacehé obtuvo 10% y competirá en las generales.
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