Por Gonzalo Martìnez Ochoa 

Mauricio Macri decidió correrse del juego electoral pero no de su rol de líder dentro de Juntos por el Cambio. Por eso, hoy se reunió con los intendentes y dirigentes del PRO en la provincia de Buenos Aires, que esperaban una mediación del ex presidente para definir la estrategia electoral en la provincia con más electores.

Si la interna del partido a nivel nacional no es sencilla, con la disputa constante entre los armados -e intenciones- de Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, en la provincia de Buenos Aires es aún más compleja: más allá de la puja por la candidatura a Gobernador, cada municipio tiene sus propias lógicas y necesidades y, por ende, cada dirigente un interés distinto.

Como contó INFOCIELO, las diferencias hasta hoy pesaron más que los encuentros, e hicieron naufragar cada una de las cumbres amarillas. En La Plata hubo caras largas y el faltazo del "ala Bullrich". En Vicente López otro semblante y una foto ampliada, pero sin acuerdos. Ante ese panorama, un Macri que se colocó por encima del laberinto convocó a una reunión en su despacho de Olivos.

El llamado del ex presidente, a pocos días de haber definido que no sería candidato, despertó en los dirigentes provinciales la esperanza de que sea el líder quien ordene la interna. Sin embargo, la posición de Mauricio Macri hasta el momento es neutral con respecto a las estrategias de Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta.

Fue una cumbre cargada de rosca, a la que no faltó ningún "halcón" provincial: estuvieron Diego Santilli, Cristian Ritondo y Néstor Grindetti; los tres candidatos a gobernadores lanzados en carrera electoral. También el jefe de bloque en el senado, Christian Gribaudo; e Intendentes cómo Julio Garro, Ezequiel Galli, Javier Martínez y Diego Valenzuela.

Pese a eso, al cierre de la edición de esta nota no había aún acuerdos respecto a cómo encarar las elecciones primarias en la provincia de Buenos Aires.

Una elección distinta en cada distrito, el panorama de lo posible

Más allá del contexto de disputa interna, uno de los dirigentes PRO confío a INFOCIELO que la interna "se va a ordenar", y que la decisión de Mauricio Macri ayudó a calmar ansiedades y a destrabar una parte importante de la interna.

"El hecho de ordenar implica que se generen tensiones, que haya crujidos. No es una decantación", relativizó el dirigente del conurbano. Y anticipó que habrá sorpresas respecto a posibles cambios de bando dentro de la interna amarilla, pero que finalmente se decidirá en las urnas.

En ese contexto, la opción que hoy asoma como más viable es la de blindar sólo los distritos gobernados por el PRO, y abrir el juego en el resto de los municipios, con las dos o tres candidaturas a Gobernador que llegarán a las elecciones primarias.

"Lo que estamos pidiendo con Ritondo es boleta Y si va el intendente, no la esposa. Dentro de nuestra interna, nadie va a plantar un candidato donde alguien quiera repetir, pero también van a tener que pagar el costo", reveló el dirigente PRO a INFOCIELO.

Dentro de las posibilidades, asoma como la más potable. Sin embargo, hay voces disidentes que, hasta el momento de cierre de edición de esta nota, no llegaban a concretar un acuerdo. Se espera que en las próximas horas, luego de la reunión, los presentes resuman en un comunicado lo hablado.

A la salida del encuentro, el intendente de La Plata, Julio Garro puso el foco en otro lado y señaló que conversaron "sobre la dura situación que hoy viven los bonaerenses, ante la falta de un rumbo económico y el crecimiento de la inflación que destruye los salarios" como así también de la "inseguridad y la avanzada de las tomas de tierra que afectan la propiedad privada y generan un clientelismo político de la pobreza, promovido desde los sectores que integran el propio gobierno".