Por Gonzalo Prado

La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y el titular del PRO, Mauricio Macri, redoblan la apuesta en la interna. El expresidente quiere impedir que asuma el control de la Asamblea partidaria. La funcionaria de Javier Milei ordena la fractura de bloques en la Legislatura de Buenos Aires.

Según pudo reconstruir Letra P, el ingeniero comenzó con el poroteo dentro del PRO con el objetivo de evitar que Bullrich asuma el cargo de titular de la Asamblea, algo que se vio forzado a negociar ante el pedido de los gobernadores del espacio para que le den lugar a la ministra debido a la popularidad que tiene en la opinión pública.

Según la Carta Orgánica, “la Asamblea es la máxima autoridad del partido”. Entre otras cosas, se encarga de designar a los miembros de la Junta Electoral, del Tribunal de Disciplina y de la Comisión de Control Patrimonial y de aceptar o rechazar las renuncias y licencias de sus miembros.

 

 

Además, ejerce la supervisión general del partido y los organismos y es la encargada de aprobar la integración de confederaciones y la fusión con otros partidos y la extinción de la agrupación en el orden nacional con una mayoría de dos tercios de los presentes.

Mauricio Macri y Patricia Bullrich enfrentados en un duelo a todo o nada por el control del PRO.

Mueve Patricia Bullrich

Consciente de las maniobras, Bullrich activó su respuesta en la provincia de Buenos Aires, unos de los distritos clave. Entre este lunes y el miércoles, cinco diputados bonaerenses más un senador del mismo distrito romperán con el bloque del PRO, conformarán uno nuevo y jurarán fidelidad a la ministra y al Presidente.

La excandidata presidencial, que empuja la fusión con LLA, terminó de definir la ruptura del bloque del PRO en Diputados y el Senado el viernes por la tarde, después de una serie de consultas a integrantes de su mesa chica. La certeza de que Macri planeaba avanzar contra ella dentro del partido aceleró los plazos.

El nombre de ese nuevo espacio se terminará de definir en las próximas horas. La palabra “Libertad” estaría incluida.

Bullrich y el diputado Damián Arabia avanzan con la movida a días de la cumbre que encabezaron en el conurbano junto con el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela. Juntos empujan la fusión del PRO y la LLA. “Si Macri quiere una guerra, la va a tener. Nosotros jugamos a fondo”, adelantó un armador de la ministra de Seguridad.

El alcalde del conurbano acompañaría la decisión de la ministra y el bullrichismo busca que se sumen otros territoriales.

Mauricio Macri avanza

En la última semana, Macri comenzó a sondear a los integrantes del PRO a nivel nacional para evitar que Bullrich tenga la aprobación de la Asamblea del partido, que es el máximo organismo en el partido. La decisión de avanzar contra la ministra de Seguridad se precipitó luego del acto con Valenzuela.

Por eso, en el primer encuentro que Macri organizó excluyó a Arabia, vicepresidente del PRO. La decisión de impedir que la ministra de Seguridad ocupe ese cargo en el partido cuenta con el aval de las figuras todavía identificadas con el exjefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, de su sucesor en el cargo, Jorge Macri, y de los diputados Cristian Ritondo y Diego Santilli.

Los dos diputados, que son parte del trío que conduce el PRO en Buenos Aires, quedaron en el centro de la escena por participar de la presentación del libro de Milei en el Luna Park, lo que generó un fuerte reclamo de parte de Jorge Macri. Esa crítica sucedió horas antes de las renuncias masivas dentro del partido en territorio bonaerense.

Este lunes, Ritondo salió a tomar postura. Dijo que el PRO no es gobierno ni cogobierno y desafió a Bullrich: “Si quiere que vaya y se afilia a La Libertad Avanza”, disparó. La ministra respondió: “La interna no me importa absolutamente nada”, dijo. Hasta el cierre de esta nota, Santilli, el más incómodo, no se había expresado de manera tajante como lo hizo el titular del bloque PRO en Diputados: El Colorado sueña con ser el candidato de la convergencia.

De esta forma la relación entre Macri y Bullrich se encamina a un punto de ruptura que, a priori, no parece tener retorno. Mientras el presidente del PRO quiere esperar para hacer cualquier tipo de acuerdo con LLA, la ministra de Seguridad fomenta la fusión total.