El presidente Mauricio Macri aseguró que luego de haber “dejado atrás su experimento populista”, Argentina entró en “una nueva fase en la que puede cumplir un papel significativo a nivel mundial” y, a la vez, “transmitir la voz, no sólo del país, sino de toda la región sudamericana”. 

Durante su exposición ante el Foro Económico Mundial en Davos, dijo que la economía argentina fue “reorganizada” y que el país comenzó a transitar “la vía del crecimiento inclusivo” con la reducción de la pobreza como “objetivo primordial”. 

“La economía está cobrando auge, la inflación alcanzó el menor nivel en una década, los salarios se han recuperado, y la pobreza y el desempleo se han reducido”, aseveró el mandatario, quien remarcó que “luego de haber permanecido aislado del mundo”, el país entró “en una nueva fase”. 

“Argentina quiere transmitir la voz no sólo del país, sino de toda la región sudamericana”, aseguró Macri y puntualizó que la agenda del futuro debe enfocarse en “el empleo, inversiones en educación y fomentar la inversión privada”.

De hecho, sostuvo que el país va “bien encaminado” para ser un “interlocutor mundial”, tras haber “aprendido mucho” de las experiencias pasadas. 

Además, resaltó que en el país se logró un “consenso político en torno a una agenda de reforma permanente”, con lo cual dejó atrás “su experimento populista”.

En este punto, el jefe de Estado indicó que el gobierno ha “reducido la corrupción que crea una gran ineficacia y destruye el empleo, creando un nuevo entorno y marcos normativos que generan nuevas oportunidades”.

Por otro lado, manifestó que el sector alimentario de la Argentina “está presente en todo el mundo” y agregó que el país podría alimentar “a más de 400 millones de personas”. 

“Ningún otro país tiene mayor potencial que Argentina, en cuanto a energía solar, reservas de hidrocarburos y energías no convencionales, pero también en lo que hace al talento de su pueblo y a la iniciativa empresarial”, deslizó.