El diputado provincial Alberto Matuk, del Bloque Justicialista, hizo un llamado a la unidad de todos los peronistas jujeños y pidió dejar de lado las diferencias para empezar a poner en marcha la reconstrucción del Partido Justicialista.
La petición se encuadra en la necesidad que tiene el justicialismo local de recobrar las fuerzas y de recuperar los numerosos espacios políticos que quedaron en manos del actual gobierno de coalición.
La convocatoria a la unidad se da en el marco del comienzo de un año electoral, donde los cuerpos parlamentarios, tanto provincial como municipales, deberán renovar la mitad de sus miembros. Aunque parece prematuro hablar de elecciones, muchos dirigentes y sectores políticos ya movieron sus primeras piezas e iniciaron sondeos para tantear el panorama de cara a lo que se viene.
En ese contexto, el llamado a la unidad peronista efectuado por Matuk llega en un momento oportuno, donde el PJ busca su reorganización a través de su interventor Celso Jaque. No obstante ello, el panorama institucional del justicialismo vernáculo es bastante incierto, aunque ello no implica que los distintos sectores internos hayan desechado la posibilidad de restablecer vínculos y allanarse a las decisiones democráticas que se adopten en el futuro.
Al responder una consulta periodística sobre la situación actual del PJ, el legislador provincial señaló que "se han cambiado las prioridades y las peleas intestinas son las que llevaron al peronismo a perder la conducción del gobierno provincial y de varios municipios importantes”. Por lo mismo, insistió en que es necesaria la unidad y la concordia para ejercer la vida democrática interna.
A su entender, la compleja situación institucional por la que atraviesa el partido obedece “a las peleas entre los dirigentes”. Por ello, instó a los peronistas a retomar el camino de la unidad y a tener presente una de las máximas del General Perón, cuando sostenía que “primero está la Patria, después el movimiento, y por último los hombres”.
"Somos los dirigentes los que estamos en conflicto permanente y esto no es bueno para el peronismo. Necesitamos la unidad, la armonía, y una relación razonable que permita el ejercicio de una vida interna en democracia", remarcó.
Más adelante, advirtió que sin una sana convivencia y sin organicidad, el PJ no podrá obtener resultados positivos en la próxima contienda electoral. "El PJ tiene la obligación moral de superar esta instancia, hacerse cargo de las banderas del peronismo y trabajar para Jujuy, pero todos unidos y hermanados para hacer un buen papel”, aseveró, al tiempo de indicar que lo que suceda este año en materia electoral se verá reflejado en las elecciones generales de 2019.
Por último, reiteró que es necesario que los referentes de los distintos sectores internos del justicialismo dejen de lado sus diferencias y comiencen a enfocarse en cumplir el rol que el electorado les otorgó en los comicios pasados. "En las últimas elecciones los jujeños le dieron al PJ el rol de oposición y por lo mismo tenemos actualmente la responsabilidad controlar y reclamarle al gobierno las cosas que están mal, además de tener una actitud responsable ante los grandes temas de Jujuy y de los jujeños”, enfatizó.
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