En la tarde del domingo 25 de noviembre, Carlos Sebastián Mendoza y su hermanita paseaban con sus abuelos por el Camino de Cintura, en inmediaciones del Puente 12 y el semáforo frente al aeroclub del Centro Universitario de Aviación detuvo la marcha del Ford Orion. Quedaron en tercera fila, esperando la luz verde para avanzar, cuando un 'asesino al volante' desató la tragedia.

El fuerte impacto en la parte trasera, provocado por un Peugeot 504, conducido por Oscar Aranda Serrano, dejó un saldo de heridas mortales en el niño, de 11 años, y graves lesiones en la pequeña, quienes iban sentados atrás.

Han pasado tres meses, sin que la causa logre avanzar y esta tarde, a las 19, en el lugar del hecho, los familiares de la víctima pintarán una estrella amarilla en su memoria y pedirán que 'se haga justicia'.

Dolor de madre

Miriam Martínez, madre de Sebastián Mendoza, no encuentra consuelo, pero tampoco respuesta que la ayuden a mitigar el dolor. 'El hombre que mató a mi hijo no sabemos donde está, les mandan las citaciones judiciales a un domicilio en la zona de Gregorio de Laferrere y nunca más se ha presentado. Cuando ocurrió todo, lo llevaron al Policlínico de San Justo totalmente borracho para sacarle sangre, pero ni siquiera estuvo un día detenido. A pesar de haber matado a un nene y provocarle fracturas expuestas a una nena, sólo le dijeron que estaba acusado de 'homicidio culposo' en una causa y se fue a su casa', denunció la mujer, en diálogo con DIARIO POPULAR.

La investigación del trágico episodio, que no puede atribuirse a un accidente, se encuentra a cargo de la fiscal María Cecilia Revello de la Unidad Funcional de Instrucción Nro. 1 de La Matanza y tiene como imputado por el 'homicidio culposo y lesiones' (ambos delitos excarcelables) a Serrano, de nacionalidad boliviana. 'A través de nuestro abogado, Américo Santillán, hemos solicitado el cambio de carátula, ya que por como ocurrieron las cosas, entendemos que hubo dolo y se cometió un homicidio simple. Sabemos que las leyes en los hechos de tránsito, muchas veces favorecen a quienes los provocan, pero una persona que maneja borracho, a toda velocidad y hasta reconoce que se quedó dormido merece ir preso, la mayor de las condenas', señaló Miriam Martínez.

Hoy al cumplirse tres meses del desgraciado suceso, al margen de dejar asentado el recuerdo para el niño Sebastián Mendoza con su nombre en una estrella amarilla, su familia exigirá que 'se agilice el expediente. Todavía no están los resultados de las pericias accidentológicas, ni los estudios que, se presume, le hicieron a Aranda Serrano. De todas maneras, sabemos que no vamos a bajar los brazos hasta que se haga justicia y ahora nuestro temor mayor es que se fugue, mientras seguimos sin entender como alguien que mata ande libre por la calle, con la posibilidad de volver a hacerlo, ya que quien controla que no continúe manejando', afirmó Miriam Martínez quien no baja los brazos pese al enorme dolor