Por: Gimena Fuertes

Sergio Massa tiene hasta este jueves para salir a buscar el voto “casa por casa”. Detrás suyo se encolumnó toda la dirigencia de Unión por la Patria, que salió a militar su candidatura en los medios y en el territorio. La agenda, que incluye visitas a Rosario y Mar del Plata, marca una acelerada seguidilla de actos que incluyen a la CGT, la CTA, el Movimiento Evita y los intendentes. El músculo peronista en acción.

En el búnker de campaña de la calle Mitre al 300 algunos miran encuestas y otros no porque desconfían. Dicen que hay mucha gente que va a ir a votar y que no está siendo registrada por los sondeos de opinión. De igual modo, están preocupados por el alto nivel de ausentismo que se vio en las elecciones provinciales.

En promedio, ven a Massa pisando los 30 puntos y a Axel Kicillof con dos a cuatro puntos más, ya que suma los votos de Juan Grabois también. Además, los intendentes con buena imagen están traccionando la boleta de abajo hacia arriba, según cuentan fuentes partidarias. Son dirigentes locales a los que no les pega directo la suba inflacionaria que fue empujada por la carne y los servicios públicos.

En parte es por eso que en estos días de fin de campaña previa a las PASO Massa caminó este sábado las calles de Berazategui junto al histórico intendente Juan José Mussi donde participó de un festival local y este domingo estará junto a Ariel Sujarchuk en Escobar donde realizará una recorrida.

Ya el domingo por la noche Massa participará en Ferro del acto que organizó el Movimiento Evita junto con Somos Barrios de Pie y la Corriente Clasista Combativa, dos organizaciones que solían marchar junto a la Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), encuadrada en la candidatura de Juan Grabois junto con el Frente Darío Santillán. Muchas de estas organizaciones comparten el paraguas de la UTEP, el sindicato que las nuclea y que muestra divididos sus apoyos entre los dos candidatos de UP.

Por el lado del mundo sindical, Massa tiene previsto este lunes un acto con estudiantes de la Universidad de San Martín y luego otro con los dirigentes de la CTA que conduce Hugo Yasky. Por la noche realizará una tercera actividad junto a intelectuales. Ya el martes será el último orador del acto que está preparando la CGT en un estadio en el partido de Malvinas Argentinas.

El martes Massa viaja a Rosario donde el ministro de Obra Pública, Gabriel Katopodis, le armó una agenda junto al de Transporte Diego Giuliano -también rosarino-. Incluye la visita a una fábrica de electrodomésticos. Allí hablará sobre la seguridad y propondrá replicar el modelo Tigre de “multiplicar los ojos en materia de prevención con inversión”.

Por la noche del martes volverá a Buenos Aires para participar del cierre de campaña del precandidato a jefe de gobierno porteño Leandro Santoro, en el Gran Rex, del que participarán también todos los precandidatos y precandidatas que integran la lista e invitados especiales.

Y el miércoles visitará Mar del Plata donde hará campaña con la precandidata local, la titular de la Anses, Fernanda Raverta, quien intentará quitarle la ciudad al macrista de Guillermo Montenegro. Por lo pronto, según contaron fuentes partidarias a Tiempo, se evalúa que el cierre de campaña se realice en territorio bonaerense, pero todavía no está definido ni el formato ni el lugar. Se especula que puede ser un acto o una caravana en el partido de Pilar o de Malvinas Argentinas.

“Vamos a hacer el acto de cierre que sea mejor para la campaña. Monitoreamos diariamente lo que hay que hacer, los mensajes y las actividades para decidir. Nuestra campaña es flexible y ágil para ser eficaz”, describen desde el equipo de comunicación.

En el comando estaban contentos con el funcionamiento del esquema de defensa colectiva que se implementó a partir de la reunión del martes con el consultor catalán Antoni Gutiérrez Rubí. Desde ese día, candidatos y candidatas a cargos legislativos y ejecutivos, pero también asesores como el embajador Daniel Scioli y Julián Domínguez, comenzaron a salir por los medios para darle un plafón de sostén a su candidatura, sobre todo en esta semana en la que su rol de ministro tuvo que estar en modo activado de manera permanente ante el vencimiento de intereses de la deuda con el FMI que logró pagar a partir del salvataje qatarí.

“La estrategia de los dirigentes voceros tuvo buena repercusión. Pudimos mostrar la misma sintonía, la misma bajada de ideas y sobre todo cohesión dentro del amplio abanico de candidatos de todos los colores, desde Juliana Di Tullio, Scioli, sindicalistas, Wado con Malena y Sergio en Tigre, todos encolumnándose detrás de UP”, describen desde el equipo massista.

Esta semana apareció en la campaña Cristina Fernández, quien recibió al intendente matancero Fernando Espinoza, que pretende reelegir y compite en las PASO con la dirigenta del Movimiento Evita Patricia Cubría, quien a su vez se había reunido con Massa. “Se reparten los roles”, consideraron desde el búnker oficialista.

De todos modos, hasta el momento no hay confirmación de que la vicepresidenta vuelva a tener otra actividad proselitista en esta semana antes del jueves, cuando vence el plazo para hacer actos de campaña. Sin embargo, no se descarta esa posibilidad. Algunos, por lo bajo, se entusiasman: “No me extrañaría”. «