Por Yanina Soria.

El secretario privado del gobernador santiagueño, Gerardo Zamora, llamó personalmente a cada uno de los 25 intendentes y jefes comunales radicales del norte cordobés que fueron invitados a una cena política que finalmente tuvo lugar el lunes en la localidad de Ojo de Agua. 

Con asado y cabrito de por medio, el encuentro entre los correligionarios no tuvo otro objetivo que cerrar filas detrás de la candidatura de Sergio Massa a menos de una semana del balotaje. Todos sabían para qué los convocaba el aliado clave del tigrense, quien -en su momento- presionó junto a otros gobernadores para lograr el ingreso del renovador al ministerio de Economía de la Nación y tuvo mucho que ver en que Massa termine siendo el candidato de la unidad de Unión por la Patria. Bien vale recordar que en el 2019 el santiagueño también le había acercado intendentes radicales al por entonces presidenciable, Alberto Fernández.  

Cuentan los presentes en la reunión del lunes que no se habló de gestión sino de política. Zamora hizo un racconto de las propuestas del libertario Javier Milei en materia de coparticipación, salud, y educación, entre otras áreas claves, y fue claro al trazarle a los jefes comunales lo que cree, será un escenario sombrío para las provincias y el intendentismo del interior si efectivamente gana la Libertad Avanza el domingo próximo. 

Allí, entonces, el santiagueño les pidió el acompañamiento electoral a Massa que, según los propios protagonistas, todos se comprometieron a dar. 

De hecho, en medio del encuentro -que describen se desarrolló en un clima distendido y de mucha camaradería- el anfitrión abrió una videollamada con el propio Massa que saludó a cada uno de los intendentes cordobeses. El ministro-candidato les agradeció el apoyo y se comprometió a acompañar las gestiones municipales si el 19 de noviembre se convierte en presidente. 

Lo mismo hizo la semana pasada con otro contingente de alcaldes radicales (la mayoría mestrista) que almorzó con el gobernador de La Rioja en la misma tónica política de la cena que organizó Zamora. 

Pues, tal como adelantó Alfil, el peronista Ricardo Quintela, uno de los armadores del massismo en esa zona del mapa nacional, convocó a otros tantos alcaldes peronistas y muchos boina blanca para charlar en el marco de la segunda vuelta electoral. Incluso, hubo jefes comunales como el de Serrezuela, Ricardo Martín, o Antonio Heredia de Olivares de San Nicolás, que asistieron a los dos encuentros. 

La eliminación de Patricia Bullrich de la competencia presidencial desordenó internamente a los aliados de Juntos por el Cambio, pero el acuerdo cerrado apenas horas después de las generales de octubre entre la ex candidata y el ex presidente Mauricio Macri con el libertario Mieli, directamente desalambró al espacio y lo puso al borde la extinción. En Córdoba, con uno de los electorados más fieles hasta, en Juntos se desoyeron las posiciones orgánicas de los distintos partidos aliados y cada quien definió lo que quiso frente al balotaje. 

Y eso se puede palpar claramente en la UCR: los intendentes del interior se volcaron, por un lado, a acompañar a Massa mientras que otros defienden la posición libertaria. 

De hecho, al encuentro de Santiago del Estero asistieron alcaldes alienados con Rodrigo De Loredo, Ramón Mestre, Soledad Carrizo, Dante Rossi, y hasta con la propia vicegobernadora Myriam Prunotto. Los jefes municipales aseguran haber tomado la iniciativa por motus propio y convencidos que Milei, “es un límite”. 

Sin embargo, luego de que Zamora diera a conocer públicamente (con foto incluida) el apoyo de los hombres del interior de la UCR cordobesa a Massa, se encendió la polémica. 

Pues, en diálogo con Cadena 3 el deloredista Carlos Ciprian, intendente de Sinsacate, intentó despegarse del propósito político del asado compartido con el gobernador santiagueño: “A la reunión me llevó la posibilidad de gestionar dinero del municipio, sobre una ruta que le correspondía a Nación, y no la hacía. Nosotros pusimos los recursos, es una gestión que hacemos del pueblo ante el Gobierno provincial. Y eso se viabilizó a través de Zamora”. 

Quien salió a retrucarlo fue su par de la localidad de Candelaria Sud, Fabián Luna. En declaraciones a Alfil, el jefe comunal de Totoral dijo: “Cada uno de los intendentes sabemos que para gestionar obras tener que recurrir a las dependencias nacionales pertinentes. Si aceptas ir a una cena en un quincho de Ojo de Agua, donde claramente no hay ninguna oficina, a días del balotaje, y encima convocado por un gobernador radical pero que hace 18 años integra un frente aliado al kirchnerismo, sabes que es para conversar de política. No hay otra. El dirigente que fue lo hizo por conveniencia o convicción”

Con polémica o sin polémica, por lo alto o por lo bajo, la realidad es que Massa sigue cosechando apoyos de líneas no peronistas en Córdoba. 

Fueron parte de la cena con Zamora, Melisa Oviedo de Villa Pocho; Adrián Garay de San Pedro; Heredia Carmen Antonio de Olivares San Nicolás; Manuel Farías de La Batea; Alejandro Cortez de La Cañada; Martín Ricardo de Serrezuela; Fabián Luna de Candelaria Sud; Claudio Tripiana de Los Pozos; Sebastián Peralta de Villa Tulumba; Mario Centurión de Capilla Siton; Rubén Velázquez de Cañada De Luque; Carlos Cipriani de Sinsacate; Guillermo Moyano de Sarmiento; Gury Quiñones de El Rodeo; Diego Rojas de Santa Elena; José Luis Ludueña de La Rinconada; Rodolfo Ganz de Puesto Castro; Sebastián Argañaraz de San Francisco Del Chañar; Ariel Gutiérrez de Rio Pinto; Gladis Espíndola de Pozo Nuevo; Mariela Belén de Villa Candelaria; Daniel Medina de Las Arrias; Paola Martínez de Tala Chañar; Martín Catañia de La Salada; Ariel Aliendro de Altos Los Quebrachos.