Tras haber transitado el rol de presidente en el Club Villa Progreso a lo largo de diez años, destacó la importancia de estos espacios y el desafío a la hora de mantenerlos, más aún durante la pandemia “donde se dio una pelea constante con el Municipio para obtener los insumos, porque sí llegaba una parte que eran los secos, pero no los frescos”.

A partir de esta situación, comentó: “Le pedimos a Fabián Cagliardi, a través de una nota, que descentralice Acción Social, pero luego se dio algo que me dolió muchísimo porque dijo que no lo iba a hacer ya que no confiaba en la gente de los clubes, que si la gente tenía hambre que camine 50 cuadras”.

“Ahí lo empezamos a conocer a Fabián, y yo no esperé algo así de un compañero peronista”, agregó.

Hoy, desde la Delegación, “tenemos que ver cómo solucionamos la problemática de las obras, porque algunas de ellas se hicieron mal, hubo poco mejoramiento de calles, mientras que mis compañeros municipales están todo el día trabajando”.

Por eso, consideró que para revertirlo tiene que haber una decisión política para “dar lugar a otra delegación porque la que está no alcanza”.

Uno de los ejemplos está en calle 79 y 125 “donde no hay cuadrillas grandes de zanjeo, las cuales no llegan a cubrir todo el barrio”; cuestión de “parche” que se nota cada vez que llueve. Lo que sí se hizo “se logró gracias al presupuesto participativo que se dio en la gestión de Enrique Slezack, pero ahora falta inversión”.

Dicho esto y corriéndose al plano político, Romero anunció que están planificando para el próximo año, viendo lo que se va a articular, “mediante nuestro acuerdo con distintos sectores políticos”, dejando en claro que no quieren ser oposición pero sí “que la cabeza del Municipio no es peronista, el desprecio que hay hacia los empleados lo deja en evidencia”.

A diferencia de esto “siempre tuvimos como referente a Cristina” Fernández de Kirchner a quien le marcaron los errores “pero en sí es la que tiene más trascendencia”. Y en lo local, “se necesita de todos para ganar y gobernar bien. Vanesa representa un sector y ella se separó de la gestión porque Fabián no dejaba discutir la política”.

“Fabián no tiene un funcionario que resuelva”, indicó, asentando que “la única reivindicación es la salarial”.

“En la interna política tenemos que saber respetarnos, y ojalá que en el Concejo se apruebe el proyecto vinculado a salud porque estamos muy expuestos”, cerró.