Por Nicolás Fassi.

Desde Córdoba

Como si se tratara de un mantra, el gobernador Martín Llaryora reafirmó por enésima vez su apoyo a la Ley Bases. Fue en Bell Ville, corazón de la pampa gringa productiva cordobesa. “Vamos a firmar. Creemos que el gobierno tiene que tener herramientas”, soltó el mandatario en un territorio amigable a los ideales libertarios y donde la cosecha personal de votos le dio la espalda en las provinciales.

Sin embargo, del otro lado, el silencio es moneda común. Con la afable figura de Guillermo Francos, con el que Llaryora mantiene una fluida relación, la Casa Rosada “cinturea” los reclamos.

Más allá de esto, lo cierto es que el verdadero reclamo del cordobés va por otro carril: el de los fondos que no vienen desde Nación. Salvo en mayo, donde extraordinariamente el Estado nacional giró transferencias por 425.000.000 de pesos, un 368,2% más que en el mismo mes de 2023 en términos nominales.

La llegada de estos anabólicos, producto de la liquidación de Ganancias para las empresas, es maná en el desierto. Un regalo caído del cielo que no volverá a repetirse.

De hecho, por transferencias, Córdoba recibió $3.280 millones de pesos en junio. Es un 80 por ciento menos en comparación a 2023. Es decir, que salvo el hiato de junio, el resto vino para atrás. De hecho, son 13 las jurisdicciones que dejaron de recibir, desde marzo, las transferencias automáticas para la Caja de Jubilaciones.

“En los primeros seis meses del Gobierno de (Javier) Milei, Córdoba ya perdió 250.000 millones por la caída de recaudación, además de casi 50.000 millones más por el recorte a la Caja, el incentivo docente y los subsidios al transporte”, lanzó Llayora en declaraciones al diario La Voz del Interior.

El último informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), dio cuenta que la provincia mediterránea recibió fondos por un 93,7% menos respecto al primer semestre del 2023 en términos reales. En moneda constante y sonante, la Docta que brindó las herramientas necesarias al gobierno fue “compensada” con apenas 4926 millones de pesos.

Los números de junio volvieron a mostrar que las cuentas cordobesas siguen en rojo. En el sexto mes del año, la recaudación alcanzó en junio 502.305 millones de pesos. O sea que en términos reales, la caída fue del 17%. Dentro de ese desagregado, que volvió a la “normalidad” tras el maná de mayo, los envíos de la Nación cayeron al 23%.

El grifo larga cada vez menos. Ni hablar del reclamo por las retenciones, algo conjunto con otros gobernadores “gringos”.

“Con el Gringo la historia era otra”

Flashback marzo 2023. Juan Schiaretti se apresta a lanzar, por enésima vez, su aventura nacional que, spoiler alert, lo dejó en la primera vuelta con un interesante caudal de votos. Uno de los tópicos básicos a cumplir, siguiendo la tradición de José Manuel de la Sota, es arremeter a la Nación por los fondos de la Caja de Jubilaciones. En un escrito presentado ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, el Gringo reclamó por incumplimiento del envío de los recursos para cubrir “las transferencias que surgen entre los cálculos del déficit de los periodos 2020, 2021 y 2022 efectuados por la Caja de Jubilaciones y los valores correspondientes a los anticipos no actualizados girados por el Estado Nacional a la Provincia”. Es decir que el paso por los estrados era moneda corriente hasta no hace mucho tiempo.

Sin embargo, los tiempos cambian. En una provincia donde el 70% se volcó por la opción libertaria, salir con los tapones de punta contra la figura presidencial no reditúa. La lluvia de silbidos cosechada el 25 de mayo en el Cabildo fue una muestra de ello.

Agua de las piedras

Mientras pilotea las negociaciones salariales con el sector docente, que ya lanzó un paro provincial para dentro de dos semanas, al final del receso escolar, el gobernador cordobés se recuesta en sus pares de la Región Centro para darle plafond nacional al reclamo. “Córdoba cumple con los pagos a los jubilados pese a los recortes. Pedimos nada más que se cumpla la ley. Nada más”, explicó flanqueado por Maximiliano Pullaro y Rogelio Frigerio.

Un dato no menor es que en la última y rechazada oferta de recomposición salarial docente, la provincia descarga en la Nación la posibilidad de suspender dos medidas que afectan directamente a los salarios. La primera es la ley 1074, que habilita un incremento del aporte obligatorio de los salarios estatales de entre el 2% y el 4% adicional. En segundo término, la ley 10694 mediante la cual los jubilados y pensionados perciben los aumentos con dos meses de retraso respecto de los activos.

En el último tramo del acta de ofrecimiento, la Provincia da cuenta que estas medidas serán “revisables sin se envían los fondos nacionales reclamados para la Caja de Jubilaciones”.

Caramelo de madera

Con cara de circunstancia, Llaryora tuvo su foto con Francos, Karina Milei, Luis Caputo y el resto de los gobernadores del norte. La excusa fue puntear los 10 mandamientos que se firmarán el lunes. La verdadera fortaleza de la foto fue mostrar el apoyo, por si hacía falta, a la gestión de milei y hacer el caminito hacia lo prometido por el jefe de Gabinete: la transferencia de las obras públicas financiadas por la Nación a la provincia.

Claro que el tenor es el mismo. Mientras las herramientas cordobesas viajan sin solución de continuidad para la Nación, desde Balcarce 50 no vuelve ni un tornillo.