Con Martín Gill fuera del Ministerio de Cooperativas, empezó el juego de la silla en el gabinete de Llaryora

Con Martín Gill fuera del Ministerio de Cooperativas, empezó el juego de la silla en el gabinete de Llaryora

Renunció para enfrentar un juicio por violencia de género. El oficialismo asegura que no hay urgencia para definir su reemplazo. La tómbola de nombres.

Por Yanina Passero.

El ministro de Cooperativas y Mutuales, Martín Gill, finalmente presentó su renuncia al gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, para dedicarse a su defensa en el marco de un juicio por violencia de género. La silla vacía dispara las especulaciones sobre el futuro de una cartera estratégica.

La decisión fue comunicada por el exintendente de Villa María, este miércoles por la noche, a través de sus redes sociales. “Motiva la presente la decisión de ejercer de manera inquebrantable el derecho de defensa que como garantía constitucional me asiste, con todos los recursos y elementos que se encuentran a disposición y la decisión es de hacerlo como un ciudadano común", escribió.

La semana pasada, la jueza de Control, María Soledad Dottori, confirmó la elevación a juicio luego de rechazar un planteo de la defensa de Gill, que cuestionó la actuación de la fiscal Juliana Companys. El ahora exfuncionario, que asegura que probará su inocencia, deberá responder por el delito de lesiones leves calificadas en perjuicio de su expareja, Lourdes Astudillo.

Llaryora creó la cartera para articular de manera directa con las 1.400 cooperativas y casi 400 mutuales registradas en la provincia. Estos espacios de empuje del crecimiento económico, pero también de anclaje territorial necesario en tiempos de nuevas construcciones políticas, quedaron bajo la órbita del exsecretario de Obras Públicas durante la gestión de Alberto Fernández, que jugó un rol clave en el armado electoral llaryorista de cara a la elección provincial de junio de 2023.

La elevación a juicio de su causa y la posibilidad de que prosperara un juicio político en la Legislatura hicieron su salida impostergable, pese a que el gobernador sostuvo su decisión aún con la fuerte presión opositora.

Las opciones de Martín Llaryora

Con la salida definitiva de Gill del primer ministerio de Cooperativas del país, creado en momentos donde la moda violeta invitaba al achique de los resortes del Estado, Llaryora deberá tomar una decisión sobre la vacante.

Desde el pedido de licencia, la firma quedó a cargo del Ministerio de Vinculación Comunitaria, Protocolo y Comunicación de la provincia. Sin embargo, las primeras versiones oficiales sobre el tema no variaron desde que la oposición en la Unicameral empezó a presionar por la salida del exrector universitario.

Martín Gill se sumó al Partido Cordobés y respaldó la candidatura provincial de Martín Llaryora.  Radio Villa María

“No hay apuro”, responden ante la consulta sobre el reemplazante de Gill. Como contó Letra P, Llaryora aumenta la presión sobre su gabinete en el sprint final del año y no está descartado un reajuste general. Si el sanfrancisqueño designará a una nueva autoridad en Cooperativas o dividirá sus funciones es la gran pregunta por estas horas en el Panal y las dos opciones concretas que manejan sus adláteres encumbrados.

Por ahora, el Ministerio seguirá funcionando con su organigrama inicial: el secretario de Infraestructura, José Ferrero; el de Desarrollo Cooperativo, Domingo Benso; y el de Planificación y Vinculación Territorial, Gabriel Frizza.

Las versiones sobre el futuro del primer Ministerio de Cooperativas de Córdoba

En los pasillos del Ministerio sin ministro sobrevuela la convicción de que Llaryora no retrocederá con su idea de jerarquizar el vínculo con el sector cooperativista de la provincia. Si se impone esta lógica, la designación de una nueva persona responsable no tardaría en llegar.

Como es habitual, empieza la tómbola de nombres. Por estas horas, suena Juan Manuel Llamosas. El exintendente de Río Cuarto asumió como una suerte de ministro blue para rearmar el sur cordobés bajo la órbita del ministro de Gobierno, Manuel Calvo.

No deja de resultar curioso que Llamosas suene para todas las vacantes disponibles. Primero estaba en el lote de los candidatos a la vicegobernación; después, se escuchó en la pelea por Defensoría del Pueblo. Nadie lo descarta como cabeza de la lista cordobesista para la Cámara de Diputados y ahora se agrega a Cooperativas.

Juan Manuel Llamosas tiene como objetivo rearmar políticamente los departamentos del sur de Córdoba, en articulación con el ministro de Gobierno, Manuel Calvo.

En la trama especulativa aparece el legislador peronista Abraham Galo, exsubsceretario de Cooperativas durante la administración de Juan Schiaretti.

Sin embargo, como suele suceder con quienes ocupan una banca, una salida o entrada puede cambiar el mapa de poder en un recinto con empate de fuerzas entre el oficialismo y la oposición.

La vía de la reabsorción del Ministerio que ocupó Martín Gill

Otra posibilidad que contempla Llaryora es la desarticulación de la cartera. Antes estaba bajo la órbita de Industria, pero no parece probable que el macrista Pedro Dellarossa asuma el volumen de responsabilidades, menos cuando su nombre suena en todas las esquinas del Panal como el amarillo que está en la cuerda floja. Una versión que, por cierto, relativizan en la mesa chica del gobernador.

“Tiene que ser un peronista”, largan espuma por la boca algunas fuentes con dedos en V... y las posibilidades siguen.

"Los López" del gabinete asoman en el juego de la silla. Antes de que Julián López fuera designado en el Ministerio de Justicia y Trabajo sonaba como candidato para manejar Cooperativas, hasta que Gill empezó a ganar posiciones. Fabián López, del Ministerio de Servicios Públicos, también tendría chances de ampliar la injerencia si efectivamente Llaryora decide un cambio en su estructura ministerial.

El ministro de BioagroindustraSergio Busso, y su par de Ambiente, Victoria Flores, también podrían pechar para tener la vinculación directa con las cooperativas del sector agropecuario y el reciclado.

Sin embargo, en este deporte especulativo tampoco se descartaba que Llaryora sumara a un hombre fuerte del cooperativismo para conducir los destinos de su gran apuesta de gestión.

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