El vicegobernador mantuvo la semana pasada un encuentro con el destituido intendente de Pinamar, Roberto Porretti. La idea de Gabriel Mariotto es reimpulsarlo para que pueda competir por nuevamente por la intendencia en reemplazo del también destituido, Blas Altieri.
Gabriel Mariotto y Roberto Porreti tejen una alianza que permita al destituido intendente de Pinamar retornar al poder en esa ciudad balnearia tras la caída de Blas Altieri, otro jefe comunal destituido por desempeño irregular. Para eso, el vice y el ex intendente mantuvieron un encuentro la semana pasada en el que avanzaron con los primeros trazos de ese acuerdo.
Es que la posibilidad de una nueva elección asoma tras la destitución de Altieri. Ahora el tema está en manos de la Corte Suprema bonaerense. Si los jueces confirman la destitución del jefe comunal en el transcurso de 2013, será el gobierno provincial quien deberá fijar fecha para nuevos comicios. Por el contrario, si esa definición ocurre el próximo año, el ejecutivo quedará en manos del interino Hernán Muriale.
Porretti, ahora en alianza con Mariotto, intenta promover el primer escenario. De no prosperar iría el próximo año por la renovación de su banca de concejal para intentar retomar el Ejecutivo en 2015.
El ex jefe comunal y el vicegobernador se necesitan mutuamente. Porreti requiere un paraguas que le sirva de protección política en la causa que pesa en su contra. “No puede ser candidato sin la protección de alguien con poder. Incluso el mismo peronismo es quien se encarga de ‘moverle’ la causa cada tanto. Por eso es que necesita a alguien de peso como el vicegobernador”, explican a LPO fuentes del poder político de Pinamar.
Para Mariotto, lograr instalar un intendente puede significar una jugada de impacto político que le permita recuperar el terreno perdido. Aunque ese intendente cuente con una destitución en sus espaldas por extorsión.
Porretti fue suspendido en marzo de 2008 por el Concejo Deliberante luego de una denuncia por parte de los empresarios Rubén Cameroni y Javier Porjolovsky, por intentar cobrarles 400 mil pesos para no cerrarles su discoteca.
En el ámbito político de Pinamar sostienen que, de abrirse la posibilidad de una elección a intendente aparecen en el escenario tres posibles candidatos: El propio Altieri, Porreti y la concejal radical Mercedes Taurizano.
Altieri es quien por estos días cuenta con la peor imagen negativa. Porretti aparece complicado con su causa judicial luego que la Cámara Penal de Dolores determinara la nulidad del sobreseimiento.
Sobre Taurizano, radical alfonsinista, señalan como su principal debilidad la incapacidad para lograr acuerdos políticos que le permitan llegar a al intendencia.
Mariotto llegará formalmente a Pinamar este viernes. Participará de un homenaje al reportero gráfico asesinado José Luis Cabezas. Allí seguramente hablará con todos los actores políticos. Sin embargo, la reunión con Porretti fue la semana pasada y a solas.
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