María Kodama, quien ayer deleitó a los catamarqueños con una charla a un salón colmado en su capacidad en el Museo Caravati, se reunió esta mañana con el vicegobernador Dalmacio Mera y visitó luego la Biblioteca del Senado donde se le hizo entrega de una declaración de interés de la obra de Jorge Luis Borges y obsequios de manos artesanas catamarqueñas.
En sus últimas horas en Catamarca, la prestigiosa creadora y presidenta de la Fundación Jorge Luis Borges, María Kodama, se reunió con Dalmacio Mera, con quien mantuvo una amena charla en la que, sin lugar a dudas, no faltó la referencia a nuestro querido poeta belicho, Luis Franco, y otros tantos escritores de nuestra provincia. Acompañaron al vicegobernador además, el presidente Provisorio del Senado, Daniel Saadi, y el senador Néstor Figueroa. Durante el encuentro Kodama volvió a referir a anécdotas sobre Jorge Luis Borges y contó sobre el trabajo que encara la fundación, además del museo que lleva su nombre. El relato se entrecruzó con anécdotas y referencias de nuestro acervo cultural, aspectos de los que se mostró particularmente interesada. Luego, en el anexo de la Cámara de Senadores, visitó la Biblioteca “Dr. Mario Dardo Aguirre”, oportunidad en la que se interiorizó del trabajo que en ella se desarrolla, saludó a estudiantes que se encontraban en el salón de cultura y felicitó al vicegobernador Dalmacio Mera por este espacio y la importancia que le ha dado esta gestión y, el ámbito legislativo, a esta biblioteca, una de las más consultadas de la provincia. En ese ámbito Mera hizo entrega a Kodama del decreto a través del cual la Vicegobernación de la Provincia y la Cámara de Senadores declaró de interés la obra del prestigioso escritor y poeta Jorge Luis Borges, de innegable trascendencia en nuestro país y en el mundo. Como obsequio protocolar, le hizo entrega de una bufanda de vicuña, gesto que valoró Kodama y prometió tener siempre presente, como una muestra y recuerdo de su primera visita a Catamarca, en donde según dijo, fue muy bien recibida y atendida como en su casa.
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