Uno de los dirigentes que han logrado instalarse entre los emergentes más importantes de este proceso preelectoral en La Plata es el abogado y dirigente peronista Marcelo Leyría. Es miembro de la Pastoral Social y titular de la Fundación Soñar Argentina. Con una decena de voluntarios de esa entidad comenzó a asesorar a vecinos de bajos o nulos ingresos: desde hace dos años recorre las calles de la periferia con su consultorio jurídico gratuito.
Leyría habló con este portal sobre esa experiencia y compartimos algunos interrogantes que tienen que ver con las elecciones que definirán la segunda parte del mandato de Mauricio Macri.
¿Qué cambios percibís que se viven en los barrios de la ciudad por causa de la situación económica? , es decir, ¿cómo evolucionaron las relaciones sociales en el último año, y cuáles demandas y necesidades nuevas aparecieron?
Lo que más percibimos son modificaciones en algunos hábitos de muchas familias de la periferia, que consumen menos carne, los menores toman menos leche, o los que pueden se suman progresivamente a los merenderos que tienen a mano para lograr alguna contención alimentaria. Todo como consecuencia de un incremento muy fuerte en precio de los alimentos, que no fue acompañado de un aumento en el poder adquisitivo de la gente.
¿Con la caída del empleo, te hacen consultas sobre temas laborales?
Hace dos años cuando empezamos las jornadas de asesoramiento las consultas tenían que ver mayoritariamente con temas de familia. Desde hace unos meses la tendencia cambió, y ahora predominan las consultas por temas laborales, por despidos fundamentalmente. En todos los sectores.
Vemos en todo el distrito una ausencia absoluta del Estado , de los organismos nacionales, provinciales y municipales. Vemos que la policía no está presente en la periferia, toda la zona norte tiene muy pocos móviles, y en barrios como El Rincón directamente no hay presencia policial. Hay zonas muy amplias del distrito que se encuentran absolutamente liberadas para el delito, y los vecinos se cuidan como pueden, pero nunca es suficiente.
¿Las asambleas vecinales contra la inseguridad te parecen un modelo que se debería propiciar?
A mí me parecen muy positivas. Todas las formas de participación ciudadana o de las intervención de las organizaciones, en las cuales el vecino se involucre en la cosa pública son positivas. Y esto posibilita que interpelen al estado para que la policía cumpla mejor su tarea.
Pero volviendo al rol del Estado, te decía que vemos ausencia de la policía pero también ausencia de contención social en casos de nutrición y pérdida de calidad alimentaria de los pibes y pibas. Cambiaron los hábitos de consumo, los menores toman menos leche o directamente no toman, en ese contexto el aporte de la escuela para fortalecer la nutrición de los más chicos es insuficiente, pero es un refuerzo muy importante que se debería incrementar.
¿Qué zona del distrito se encuentra en situación más delicada con respecto a la falta de alimentos para los más chicos?
De acuerdo a lo que relevamos con la Fundación, la zona de Abasto y Romero es donde más se siente la ausencia del Estado. Ahí vimos gran cantidad de chicos menores de 4 años sin documentos, es un desatino que no haya conexiones entre la periferia y los organismos que deberían abordar esta problemática. La Plata tiene una situación privilegiada porque desntro de la ciudad está la sede de gran cantidad de organismos, y a muy pocos minutos de la localidad más alejada del centro.
¿Te parecen un buen modelo los Centros de Gestión y Participación que se implementaron en la CABA?
Por sus características, La Plata necesita una gran descentralización del municipio. Casi nadie va a 12 y 51 a hacer reclamos o trámites. Las delegaciones no tienen personal capacitado ni hay inversión en tecnología. Falta decisión política para que el municipio esté en los 19 barrios de La Plata. El intendente optó por gobernar solo para el casco urbano y consolidar lo que él supone que es su base electoral.
Como miembro de la Pastoral Social, ¿cómo percibís que influyó el Papa en la participación de la Iglesia Católica, en el territorio en general, y en los barrios más marginados en particular?
El pensamiento de Francisco generó un cambio no sólo en la Iglesia, sino también en los dirigentes sociales. Y esto se nota en la prédica de todos los referentes de distintos estamentos y sectores, hay una mirada mucho más solidaria hacia los argentinos más humildes. Francisco irradia una luz que excede el trabajo social de la iglesia e influye considerablemente en la práctica de la dirigencia en general. Y esto se debe a una concepción mucho más humanista de la acción política. Está claro que hay una joven militancia que tiene muy presente que hay que trabajar en la periferia, donde están los excluidos, los marginados del sistema capitalista, donde el estado no llega. Es un llamado muy fuerte para que la dirigencia política vuelva a trabajar con vocación de servicio. Y hay una nueva generación de militantes o referentes sociales y políticos que tienen muy presente que en esta etapa, más que nunca, hay que ser solidarios y organizarse allí abajo, donde también se vota y existe una intensa actividad de los partidos en épocas electorales, pero el resto del tiempo el estado no llega.
¿Qué pensás con relación al trabajo y el rol de las cooperativas que prestan servicios para la Municipalidad?
Al sistema de cooperativas hay que dignificarlo con mejores salarios, asignarle mayores recursos, para que esa tarea que realizan miles de platenses esté mejor remunerada con respecto a lo que cobra un privado por el mismo servicio.
Segundo, hay capacitarlas y profesionalizarlas para que después esa cooperativa no dependa solamente de los contratos que propone el municipio, sino que también pueda insertarse en el mercado en forma competitiva.
Porque es mentira que esa gente que no quiere cumplir tareas, todo lo contrario, trabaja mucho más que muchas personas que están en blanco en la planta del Estado, son trabajadores en toda su dimensión, por eso hay que hacer una fuerte inversión en capacitación y maquinaria para que puedan competir y tener otras opciones en sectores privados.
¿Qué panorama ves en relación a las próximas elecciones?
Creo que la provincia no puede ofrecerle al electorado una pelea entre dirigentes, está esperando un modelo superador a este gobierno, una propuesta que señale una salida para adelante. La sociedad está esperando que le ofrezcamos nuevos candidatos que expresen nuevas ideas y estén cerca de las demandas de los bonaerenses
¿Te animás a pronosticar si habrá internas en el FPV?
No creo que exista espacio para una interna del peronismo, yo apuesto a que haya unidad, que se logre expresar una síntesis, contemplando toda la heterogeneidad que existe y que expresa a sectores organizados.
¿Y en la ciudad qué tendría que expresar el peronismo?
Tiene que ofrecerle al electorado platense una oferta que recupere el valor histórico que tuvo La Plata. Que vuelva a ser vanguardia en todas las áreas de la producción material y simbólica, con gente que tenga un plan de desarrollo, con candidatos nuevos que aporten un aire nuevo. Porque está claro que no podemos ofrecerle al electorado platense el mismo menú que ya rechazó, creo que tendríamos que trabajar por la unidad en la medida en que refleje una renovación, y si no lo logramos lo nuevo va a tener que confrontar con lo viejo
¿Podrá el peronismo construir y recuperar una nueva mayoría en el electorado, o imaginás fragmentación y dispersión entre diferentes propuestas electorales que provienen del FpV?
El tiempo es superior al espacio. El peronismo no va a resolver sus contradicciones en este contexto, que es el espacio. El tiempo, que es el proceso, va a ser el que resuelva las contradicciones en el movimiento, por eso hay que empezar la tarea de la reconstrucción. En ese momento comenzará a surgir un nuevo peronismo, que se corresponda con esta etapa de la economía mundial y del desarrollo histórico argentino.
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