Un nuevo desmonte que se inició a través de deslindes en tierras cuya carpeta de relevamiento ya se encuentra aprobada por el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI).
Puso nuevamente en alerta a tres comunidades que se encuentran en Hickman, pueblo que está en la jurisdicción de Embarcación, en el departamento San Martín. Ante la amenaza de seguir encerrándolos en un mar de desmontes que se viene estableciendo desde General Ballivián, los integrantes de las comunidades se preparaban a parar las topadoras.
Frente a la situación el abogado Hernán Mascietti decidió que presentará ante la Justicia de Tartagal un interdicto de no innovar a fin de frenar los trabajos ante la invasión realizada sobre territorio ya relevado. El deslinde que, según indicó el presidente de la Asociación Manos Unidas, Teodoro Paz, ya llevaba una extensión de 8 kilómetros "llegando casi al río" Bermejo, sería realizado por la empresa Tierras del Norte SRL. También se acusa de este avance a los empresarios de apellido Sumerino, Merluzzi, Orlando Prandi, Franco Macri y la Aceitera General Deheza. Los nombres fueron dispuestos en la exposición que las comunidades hicieron ante la Policía luego de que vieran que las topadoras ingresaran por detrás del pueblo de Hickman sobre territorio de las comunidades de Arbol Solo, y Las Llanas 1 y 2, y no por la ruta, razón por la cual se percataron de su presencia a cuatro días de estar haciendo los deslintes.
Paz junto con el referente de Las Llanas 2, Carlos Centeno, fueron quienes dieron las noticias a Nuevo Diario. Su reclamo se basaba en el hecho de que las tierras ya fueron relevadas y tienen la carpeta aprobada por el INAI por resolución 659, el 10 de setiembre de 2012. Esto lanza que cerca de 17 mil hectáreas fueron reconocidas como territorio originario que se encuentran entre Hickman y Dragones, sobre la ruta N° 81, a 60 kilómetros de Embarcación.
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