El diputado Rodolfo Iriart quedó conformando el bloque que se separó de La Cámpora en el bloque del Frente para la Victoria de la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires.
Y es la derivación de la por lo menos dual conducta política de su jefe Daniel Scioli, quien todavía no rompe públicamente con Cristina Fernández, en una lánguida posición que lo ha dejado su derrota en la presidencial y el escaso margen de maniobra que exhibe con el sanjuanino José Luis Gioja, que intentan salvar con una ficción la unidad del P.J. Otro tanto ocurrió con la diputada Alejandra Martínez, quien integraba el bloque por Acción Marplatense. Ambos se encuentran entre los que rompieron con La Cámpora, en una fractura como consecuencia de la derrota sufrida en la Provincia de Buenos Aires, en la Quinta Sección Electoral y en distrito de General Pueyrredón.
Finalmente, y luego de una larga crisis, se partió ayer en dos el bloque de diputados bonaerenses del Frente para la Victoria (FPV): 13 legisladores pegaron un portazo y se fueron para armar un bloque autónomo, respaldados por intendentes peronistas, el PJ bonaerense que conduce Fernando Espinoza y los referentes provinciales Julián Domínguez y Florencio Randazzo. La nueva bancada justamente adoptará esta sigla: se llamará FPV-PJ.
Del otro lado quedó La Cámpora, que por ahora retiene el apoyo de tres diputados del Movimiento Evita; del ex presidente de la Cámara Horacio González y legisladores vecinalistas. Suman 23 voluntades y mantienen el nombre original: FPV.
Quienes dieron el portazo son liderados por Walter Abarca, ex secretario de Néstor Kirchner, que había reemplazado en la conducción del bloque a José Ottavis (La Cámpora). Junto a Abarca se fueron los “dominguistas” Mauricio Barrientos y Manuel Elías; los “randazzistas” Marcelo Feliú y Andrés Quinteros; y Liliana Pintos (que responde a Espinoza).
El resto del grupo es aún más heterogéneo: Valeria Amendolara reporta al PJ de La Plata; Rodolfo Marino Iriart al ex gobernador Daniel Scioli, y Alejandra Martínez al ex intendente marplatense Gustavo Pulti. Ricardo Moccero, por su parte, es el ex intendente ultra k de Coronel Suárez; Evangelina Ramírez es la esposa del ex intendente de Quilmes Francisco Gutiérrez; Mariano San Pedro integraba el massismo y Alicia Sánchez es la esposa de Luis D’Elía.
Desde enero, tras la votación del Presupuesto 2016 y el endeudamiento solicitado por la gobernadora María Eugenia Vidal, las fracturas en el bloque del FPV quedaron expuestas. El sector que ayer rompió apoyó el endeudamiento, a pedido de los intendentes y los dirigentes con poder territorial del peronismo. La Cámpora se opuso, pero empezó a conspirar contra la conducción de Ottavis, que finalmente renunció.
Este grupo de 23 diputados podría volver a partirse y perder otros seis miembros, si se alejan los legisladores del Movimiento Evita y los que tributan a González.
La ruptura del bloque del FPV se produjo en la misma semana que Cristina Kirchner logró dar una fuerte imagen de unidad, al convocar a 51 de los 55 intendentes en el Instituto Patria. Ayer, cuando la ex presidente aún no había subido al avión para regresar al Sur, los diputados provinciales mostraron que la realidad es otra.
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