Hace poco más de un año, al grito de "Vamos Manaos", el dueño de esa popular gaseosa de fabricación nacional anunciaba junto al presidente Mauricio Macri una inversión de u$s 12 millones en una línea de producción y un nuevo depósito en su planta de Virrey del Pino, partido de La Matanza. Ayer, la foto fue completamente distinta para Orlando Canido. Esa misma planta y su propia casa fueron allanadas junto con otros 14 domicilios a raíz de una investigación iniciada por la Afip detectó "desvíos financieros e inconsistencias impositivas" que superarían los $ 900 millones.

La empresa pertenece a la familia Canido, aunque según fuentes de la AFIP quien sería su dueño, Orlando, no aparece en las sociedades que la manejan.

Esta situación no sorprende a los "sabuesos". Manaos pasa a integrar la larga lista de empresas que con éxito en el mercado y anuncios de inversiones millonarias quedan en el radar de la Afip, por irregularidades tributarias tan abultadas como sus ganancias. Una situación por la que pasaron, o se encuentran hoy, numerosas firmas de todos los sectores.

Los allanamientos de ayer fueron realizados por orden del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N´ 3 de Morón, a cargo del juez Néstor Barral. "Los hechos que dieran lugar a la intervención judicial resultaron de la verificación de importantes desvíos financieros e inconsistencias impositivas que hacen presumir la comisión del delito de evasión de la empresa, el cual se perfeccionaría así también con la utilización de una firma paralela, sin estructura y capacidad económica y financiera, a través de la cual canalizaría ventas marginales", informaron en Afip.

Durante el operativo se secuestraron libros contables, escrituras, documentación relacionada a la hipótesis delictiva denunciada y soportes informáticos.

Manaos es una de las firmas de mayor crecimiento en ventas en los últimos años en su rubroaseguran que concentra el 30% en competencia directa con Coca Cola y Pepsi y a la mitad de su precio.

A mediados de 2016, la firma inauguró su línea de producción y depósito con capacidad para embotellar, etiquetar y tapar 36.000 botellas por hora, y hasta el propio Macri se dejó llevar por la tentación de gritar "Vamos Manaos".

La frase se hizo popular de la mano de famosos que protagonizaron sus publicidades como el Chaqueño Palavecino, Martín Palermo, Enzo Francescoli y Juan María Traverso.

"Distribuíamos la gaseosa Sao, que se vendió muy bien en los 90. La empresa decidió dejarnos para vender por su cuenta y se fundió. Entonces mi tío Orlando vio que había una oportunidad en el mercado y encontró que la marca Manaos estaba vacante, sonaba parecido y la compró", relató Walter Canido, CEO de la compañía en una entrevista a El Cronista el año pasado.