Movida azul I. Se viene un escenario cada día más difícil. Para mantener el control social, el gobierno de Axel Kicillof —que pasó horas de zozobra en La Plata, cuando patrullas y personal policial rodearon la casa de la gobernación— está para avanzar en la eliminación de las policías comunales y las policías locales. Las consideran más dóciles, y menos dispuestas a arriesgar el trabajo que la conocida como La Bonaerense. Lo que no parece que se entienda es que billetera mata ideología, y la fuerza está en condiciones ruinosas. Nadie llega al día diez de cada mes, porque se rompió toda la cadena de supervivencia. No hay futbol, no hay bingos, no hay festivales, ni domas, ni carreras de automovilismo regional o local. Millones en servicios de seguridad que no ingresan al bolsillo de los agentes.

Movida azul II. Lo que sí llega, son los descuentos de las mutuales de crédito, que van directamente por planilla. Esto significa, que los sueldos son misérrimos. Se paga todo lo que se debe, y no se recibe nada que compense. Amén de ello, los chalecos de seguridad están vencidos y, obvio, no protegen la vida del uniformado. El inicio de los sumarios en estas horas, y el anticipo de Sergio Berni de que habrá sanciones, auguran una segunda ronda de situaciones complejas.

Otro pájaro en libertad. Al mejor estilo Lázaro, otro socio del silencio está en la casita de su madre, confortable y sin complicaciones. José María Núñez Carmona (a) “el Nariga” goza de detención domiciliaria. Así, en el mundo del revés, actores de la justicia federal en Córdoba atropellan los derechos constitucionales del periodista Luis Prestofilippo —conocido en las redes como “el Presto”— y el mismo sistema da beneficios por orden y cuenta del poder político a ciudadanos condenados por robarse la plata de la sociedad.

Interna UCR. Es un ámbito para entendidos. La interna de los radicales este año está marcada por el fin del reinado de Ricardo Alfonsín y marcará el inicio de una nueva era. Como nada es perfecto, en Mar del Plata al diputado Maxi Abad le disputan el cetro y la corona dos listas locales, en una de las cuales, se advierten a ex amigos y ex compañeros de ruta que abrevan en la alcahuetería del ex todopoderoso brigantino. El cierre no trajo grandes sorpresas: los que no son concejales, son empleados de los concejales. Muy lejos del ciudadano de a pie.