Mauricio Macri volvió a Mendoza para reunir fondos en una cena a beneficio de su candidatura y logró juntar a políticos y empresarios locales, a una semana de haber visitado la provincia por última vez y aprovechando para hacer distintas actividades en los departamentos del Sur y el Valle de Uco.

Es cierto que la agenda de Macri en algún momento se complicó, sobre todo porque debió suspender una actividad por culpa del viento Zonda. Sin embargo el día terminó bien porque no sólo no se postergó la cena programada sino que la mayoría de los invitados respondió a esa convocatoria.

El encuentro se realizó en el mismo hotel céntrico en el que se hizo en abril pasado cuando, pensando en las primarias de agosto, Macri pidió su apoyo a través de esta novedosa modalidad que en su momento cosechó críticas del PJ local. “Esta vez estuvo organizada por los candidatos a legisladores nacionales”, señalaron en el entorno de Macri, tratando de despegarse.

En tal sentido, esta vez la idea fue juntar fondos para la campaña local del porteño, de cara a la elección del próximo 25 de octubre, aunque a diferencia de la de abril, en la que el cubierto se cobraba $ 2.500 por persona, ahora hubo un sensible incremento, ya que anoche cada comensal debió desembolsar $ 5 mil para mostrar su apoyo. Si se tiene en cuenta que la velada contó con 500 asistentes, la recaudación sumó $ 2,5 millones.

Al evento llegó lo más granado de la política opositora local: desde el gobernador electo, Alfredo Cornejo, la mayoría de los intendentes radicales, concejales, legisladores provinciales y nacionales y los distintos candidatos.

Algunos llamaron la atención, como el justicialista Enrique Thomas, que llegó a tener su encuentro personal con Macri, hasta el ex ministro de Salud de Francisco Pérez, el recientemente incorporado a las filas macristas Matías Roby (ver aparte), quien no se separó ni un instante de Susana Balbo, a quien, dijo, le dará “todo el apoyo necesario” para que gane.

También hubo varios empresarios de distintos sectores, como la metalúrgica, la agroindustria, el agro y la electricidad, entre otros.

Sólo al Sur y al Valle de Uco

El periplo comenzó en la mañana del martes en San Rafael. Allí, en la Facultad de Ciencias Aplicadas a la Industria de la UNCuyo, Macri, acompañado por sus espadas locales, el radical y candidato a senador nacional, Julio Cobos y Susana Balbo, junto a varios dirigentes de

Cambiemos, presentó un ambicioso proyecto educativo que tiene como puntos principales: la incorporación de niños de tres años a la escolaridad y la creación de un organismo evaluador.

En realidad, la propuesta tiene cuatro ejes: el primero, dirigido a los docentes, a quienes les garantiza capacitación continua “para devolverles el prestigio que se merecen”, según dijo el líder del Pro.

El segundo eje apunta a que “en cuatro años” todos los chicos de 3, 4 y 5 años estén escolarizados. “Hoy en Argentina hay 638 mil niños que no poseen un banco en un jardín de infantes. El compromiso es construir 3 mil salas nuevas que van a solucionar este tema”, prometió.

El tercero pretende profundizar la tecnología y al aprendizaje de idiomas “para tener salida laboral rápida” y el último, “la evaluación constante”, para lo que propuso crear la “agencia pública de evaluación independiente”.

Tras esta presentación, y luego de visitar algunos barrios, Macri viajó a Tunuyán, donde junto a la comitiva dirigencial y a representantes locales de Cambiemos, reafirmó los conceptos presentados en el sur, y parte de las promesas anunciadas hace siete días, como la construcción de las presas Luján I y II y los arreglos de la ruta 7.

Pero por la tarde debió suspender un acto que tenía preparado en la plaza de Las Heras, a causa del viento Zonda.