Como un adolescente, Mauricio Macri volvió de vacaciones y se fue a la cancha. El candidato a presidente de Cambiemos aprovechó el impacto que tendría la noticia y, en campaña, fue hoy a su palco de la Bombonera y disfrutó desde allí otro título del club que tuvo a cargo.

A Macri se lo vio con su mujer, Juliana Awada, con quien se había tomado un descanso de unos días en la ciudad de Tandil, luego de cosechar en los medios la derrota con sabor a triunfo que obtuvo en la primera vuelta presidencial del domingo 25. 

Curiosidades de la política y el deporte: Boca se terminó de coronar tras derrotar al equipo que conduce (sin cargo presidencial) el dirigente al que Macri mira con más ganas de cara a la segunda vuelta, Sergio Massa. Y hay más: en la cancha el jefe de Gobierno se saludó afectuosamente con Fernando Galmarini, hincha de Boca, pero además padre de Martín Galmarini (jugador de Tigre) y de Malena, la mujer del líder del Frente Renovador. 

Con el triunfo en las manos, la presencia de Macri también resultó un aval al actual presidente de la institución, Daniel Angelici, que irá por la reelección este año, mientras "opera" en un rubro donde tiene influencias, la Justicia, por si Cambiemos gana la elección.