A sólo nueve días de las elecciones presidenciales en Paraguay, el ex mandatario Fernando Lugo se mostró preocupado por el "clima enrarecido" que vive el país y por la posibilidad de que el día de los comicios existan hechos de violencia, potenciados por el "tono agresivo" que tomó la campaña en las últimas jornadas.

"Están muy agresivos y lo que temo es que de esa violencia, hoy verbal, sólo hay un paso hacia la violencia física", dijo Lugo, en referencia a los fuertes cruces entre el candidato colorado, Horacio Cartes, y el liberal, Efraín Alegre. Ambos encabezan las encuestas para los comicios del próximo 21 de abril.

Como muestra de los temores a potenciales hechos de violencia, Lugo destacó la creación, por parte del Ministerio del Interior, de un departamento especial para garantizar la seguridad en las elecciones. "Esperemos que no pase a mayores y que se repita la transparencia y tranquilidad de 2008 –cuando Lugo resultó electo–, pero el ambiente está enrarecido. Se va subiendo de tono con el correr de los días, y eso es un presagio de violencia", insistió el ex presidente, derrocado el año pasado a través de un golpe institucional dado por su entonces vice, Federico Franco, actual mandatario de facto del país guaraní.

En ese clima, el Senado paraguayo debatía anoche la destitución de su presidente por un presunto caso de corrupción. El senador en cuestión es Jorge Oviedo Matto, del Partido Unacé, una fuerza política que se desprendió del Partido Colorado y que es dirigida por la familia del fallecido general Lino Oviedo.

Oviedo Matto fue acusado de participar en una operación oculta de venta de tierras al Estado con sobreprecios. Según la denuncia, el senador habría vendido unas 5000 hectáreas como parte de un presunto pacto político con el gobierno de Federico Franco, a quien el Partido Unacé dio su apoyo para las próximas elecciones.

Por esa razón, el Senado realizó una serie de sesiones especiales para destituir a Oviedo Matto, una decisión apoyada por un amplio abanico de legisladores, incluso por la agrupación de Fernando Lugo. "Los senadores representantes del Frente Guasú también votarán por la salida de Oviedo", confirmó el ex presidente.

Mientras los senadores debatían la destitución de Oviedo Matto, dos personas balearon la oficina del denunciante del presunto caso de corrupción, Raúl Silva, síndico de Quiebras. En el despacho de Silva se encontraba un guardia de seguridad que no fue alcanzado por los disparos, cuyo impacto se dio contra la puerta del local. "Estoy muy preocupado, asustado. Esto es muy grave", expresó Silva después del violento episodio. «