La concejala Griselda Krauth hizo referencia en el recinto de la nota publicada por EL CIVISMO Digital, en la que el OPDS bajó el puntaje de peligrosidad ambiental a Araucaria Energy. Por su parte, Nicolás Capelli dijo que "necesitamos saber qué pretende el intendente".
Sin la presencia del intendente en el recinto del Concejo Deliberante ni la palabra del bloque del oficialismo, otra vez la cuestión de la central termoeléctrica fue un tema caliente que derivó en el levantamiento provisorio de la sesión extraordinaria ante la falta de quórum.
Antes que el oficialismo rechazara el proyecto para pedir la “clausura efectiva” de la planta e iniciar una investigación, desde la oposición remarcaron la falta de definiciones del Departamento Ejecutivo.
La concejala Griselda Krauth hizo referencia de la nota publicada por EL CIVISMO Digital esta tarde, en la que el OPDS bajó el puntaje a Araucaria Energy sobre la categorización industrial, por lo que quedó a un paso de ser catalogada como de segunda categoría.
“Esta termoeléctrica tendría que haber dejado de funcionar después de la ordenanza que aprobó este Concejo. La planta está en construcción normalmente. Debería estar en deconstrucción”, afirmó.
Además, preguntó: “¿Por qué debemos seguir hablando de la termoeléctrica cuando tendría que tener una faja de clausura? En una nota Gutiérrez nos dijo que la termoeléctrica está cerrada y que solo hay una guardia cuidándola”.
Por su parte, Nicolás Capelli agregó que “el OPDS ya hizo una disminución del riesgo ambiental de la termoeléctrica. El intendente municipal debe estar dando su versión. Lo único que recibimos es un comunicado que parece cada vez más en el olvido. Los medios de prensa que quieren entrevistar a Luciani tampoco tienen respuestas. Necesitamos saber qué pretende el intendente en relación a un tema que los 20 concejales de la conformación anterior consideramos riesgoso para la salud”.
Ante el silencio del oficialismo, Miguel Prince dijo que “queremos ir directo al hueso y hablar con absoluto realismo y tratar de hacer de esto un análisis lo más realista posible. Estos días me comentaban que esto se parecía al monumento a la corrupción que fue Yaciretá. Esto para los lujanenses pareciera ser que también estamos frente a un hecho escandaloso”.
“Esto se origina apenas iniciada la gestión de Cambiemos a nivel nacional con la declaración de la emergencia energética. De eso modo lavaron la responsabilidad del estado en la generación de energía apuntando a privatizarla. Después vemos a través de algunas investigaciones que en los estatutos de Araucaria Energy que aparece como domicilio el edificio de la calle Libertad donde funciona Socma del Grupo Macri. Tendría intereses Caputo. Este grupo inicialmente se constituyó con un capital de 100 mil pesos para acceder a programas de millones de pesos”, agregó.
En tal sentido, sostuvo que “nosotros creemos que acá hubo un trámite irregular, confuso, controversial para ser generoso, con 10 expedientes en un año. Concretamente estamos ante una construcción clandestina. Vemos que siguen trabajando, más allá del acta de la Municipalidad”.
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