Igualaron 2 a 2 en un partidazo y ambos quedaron lejos del líder, que si mañana vence a Crucero sacará seis puntos de diferencia con nueve por jugar. Villalba puso en ventaja a los locales a los 14 segundos. Marco Ruben lo dio vuelta con dos goles -uno de penal- y Blanco emparejó. Pésima actuación del árbitro Delfino.
En un partido vibrante con dos equipos con diferentes estilos, San Lorenzo y Rosario Central igualaron 2 a 2 en el estadio Pedro Bidegain y le cedieron el título en bandeja a Boca.
En un encuentro válido por la vigésimo séptima fecha del torneo de Primera División, el local se adelantó en el marcador con un gol de Héctor Villalba, a los 14 segundos del primer tiempo, en una jugada muy bien conducida por Fernando Elizari. Sin embargo, el visitante decretó la igualdad a través de Marco Ruben, de penal y a los 32 de esa misma etapa. Otra vez Ruben marcó, esta vez a los 24 del complemento, luego de una muy buena jugada colectiva, pero Sebastián Blanco, a los 32, aprovechó una falla del ingresado Gómez Andrade para conseguir la igualdad.
En un duelo de estilos en el que ambos pudieron haberlo ganado, Central hizo el mayor desgaste y mostró mejor juego, aunque San Lorenzo aprovechó el contragolpe y tuvo ocasiones.
Con este resultado, si Boca le gana este domingo a Crucero de Norte le sacará seis puntos de diferencia al equipo de Edgardo Bauza, con nueve por jugar.
El árbitro Germán Delfino tuvo una floja actuación, sobre todo en la conducción, porque debió haber echado a Néstor Ortigoza por un codazo a Ruben y dejó pegar en demasía por momentos. Para la polémica quedaron un supuesto penal de Julio Buffarini a Giovanni Lo Celso previo a la escena del segundo gol del local, y una supuesta infracción de Alejandro Donatti sobre Martín Rolle por la que el juez también pudo haber cobrado la pena máxima.
Comentá la nota