El consejero escolar Darío Liendro solicitó volver a la presidencia del cuerpo a menos de un mes de haber pedido su relevo por motivos personales. Liendro pidió a sus pares el enroque para asumir responsabilidades en otros estamentos gubernamentales. En las últimas horas se conoció la novedad que desató varias especulaciones.
El consejero escolar Darío Liendro llevaba dos años en la administración educativa y se hizo de la presidencia del cuerpo en una votación teñida de internas políticas. El Frente Renovador había cerrado un acuerdo con el dirroquismo y lo acompañó para elegir a las autoridades del Concejo Deliberante y del Consejo Escolar.
En los últimos días de agosto se conoció que Liendro pidió por nota dejar la responsabilidad de la presidencia para poder asumir otras en un estamento más importante, de la cual no trascendieron detalles.
Desde el 1 de setiembre se hizo cargo en la ratificación de los acuerdos políticos el consejero escolar electo en diciembre Marcelo Pagliano. La distribución de los cargos se hizo por votación entre los seis consejeros. Pagliano recibió el apoyo del diputado provincial Lisandro Bonelli y del legislador nacional Sergio Massa. De inmediato se encomendó a la tarea. Anunció que convocaría al intendente, a los dirigentes distritales y a los gremios para “la construcción política a partir del diálogo y del consenso”, pero no le alcanzó el tiempo.
Liendro habría presentado una nota luego de manifestar verbalmente su intención.
El viernes, después del feriado local del 25, las fuentes consultadas no daban precisiones sobre lo que sucedía en el Consejo Escolar y se multiplicaban las especulaciones.
Las más firmes indicaban que Liendro podría acceder a la presidencia con el acuerdo de los otros consejeros, como lo hizo hace menos de un mes. Y que no existiría ninguna incompatibilidad con otras funciones que no fueron reveladas si cumplía él, u otra persona de su entorno familiar.
Los que azuzaban las más radicales especulaciones políticas indicaban que el acuerdo roto entre el Frente Renovador y el dirroquismo, que le costó la presidencia a la primera mujer en acceder a ese cargo en el Concejo Deliberante, Jorgelina Glorio, habían resonado en el Consejo Escolar.
La referente de la Agrupación Presidente Perón dejaría su paso a un concejal del Frente Renovador, tal vez el Dr. Gustavo Ouakim. Y en el Consejo Escolar un massista le devolvería la presidencia a un dirroquista.
El miércoles en la sesión especial del cuerpo deliberativo se conocerán fehacientemente las razones por las cuales se pide el cambio de autoridades en el Concejo Deliberante. Será interesante leer la votación de los ediles presentes en esa sesión. Porque entonces tendrían sentido las especulaciones que corren por los pasillos sobre alianzas y traiciones convenientes para hostigar al oficialismo.
Lo cierto es que el primer día de octubre podría producirse el cambio de sellos en el Consejo Escolar , el mismo día que Glorio guardará el suyo en un cajón para volver a ocupar una banca.
Es toda una coincidencia.
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