Mauricio Caminos

El jefe de Gabinete, Nicolas Posse, y el ministro de Economía, Luis Caputo, serán convocados por la comisión bicameral de Tratamiento Legislativo para que den explicaciones sobre el mega DNU 70/23 de desregulación de la economía de Javier Milei. Esa decisión tomó este jueves el cuerpo parlamentario compuesto por 8 senadores y 8 diputados, aunque es una incertidumbre saber cuándo asistirán al Congreso ambos funcionarios, los más importantes del gobierno de Javier Milei. 

La Libertad Avanza cedió a la presión de sus aliados de la UCR y los bloques federales para convocar al jefe de Gabinete y el ministro de Economía en la segunda reunión de la comisión permanente donde se tratan los decretos de necesidad y urgencia. La oposición más dura, Unión por la Patria, denunció que la maniobra busca dilatar la votación del DNU en los recintos del Senado y Diputados. Salvo que sea rechazado por ambas cámaras, el 70/23 sigue vigente.

La presentación de los funcionarios comenzará el martes próximo, aunque no está definido el orden de exposición. Además de Posse y Caputo, la bicameral va a convocar al ministro de Salud, Mario Russo; a los secretarios de Transformación del Estado y Función Pública, Armando Guibert: de Trabajo, Omar Yasin; de Agricultura, Fernando Vilella, y al flamante director de la Anses, Mariano De Los Heros. Según anticipó el oficialismo, mañana viernes por la mañana se conocerá agenda de las presentaciones.

La iniciativa de convocar a los funcionarios fue a partir de una moción del senador radical Víctor Zimmerman, acompañada por el diputado correligionario Francisco Monti y el senador Carlos Espínola (Unión Federal-Corrientes). En ese acuerdo político también participó el diputado Nicolás Massot (Hacemos Coalición Federal). “No sé si van a venir, pero deberían hacerlo si les aseguramos un ambiente seguro de discusión”, planteó a elDiarioAR uno de los diputados más encumbrados de la bicameral. “No sabemos si realmente vendrán”, agregó otra fuente parlamentaria involucrada en el derrotero de la comisión. 

Según su reglamento, en el artículo 9, la comisión “podrá convocar o invitar a su seno, según corresponda para que participen haciendo oír su opinión, a las Asociaciones, Personas Humanas o Jurídicas, Públicas y Privadas y a las Comisiones Parlamentarias Permanentes que tengan vinculación con el tema que se trate”. Pero no hace mención a que estén expresamente obligados.

“Que vengan los funcionarios que sean necesarios, que seguro se van a sentar a dar las explicaciones que hagan falta”, dijo el diputado libertario Lisandro Almirón durante la discusión en la comisión. “¿En serio creen que va a venir Posse, que no habló nunca en su vida?”, lo había chicaneado antes la senadora de UxP Anabel Fernández Sagasti (Mendoza). “Traigan a los funcionarios que quieran. Yo ya leí el DNU varias veces. ¿De verdad tienen que pedir explicaciones?”, agregó la legisladora. “El oficialismo acepta que vengan e insólitamente eso se leé como una medida dilatoria”, se quejó el diputado del PRO Hernán Lombardi. 

Otro kirchnerista que encendió el debate fue el senador Oscar Parrilli (Santa Cruz), que tomó la palabra aunque no forma parte de la comisión: “Quiero que inviten a este hombre que se llama Federico Sturzenegger”, dijo mostrando una foto de quien fue el creador del mega DNU. “Este personaje es un cobarde, no da la cara. Es el monje negro y es el enemigo de los argentinos”, completó.

Además de aceptar invitar a los funcionarios, la comisión terminó de definir sus autoridades, luego de que la semana pasada solo hubieran ungido a su presidente, el senador de LLA Juan Carlos Pagotto (La Rioja). Este jueves el oficialismo y sus aliados votaron como vicepresidente al macrista Lombardi y, como secretario, al senador Zimmerman. No tuvo lugar de autoridad UxP, pese a que tiene 6 de los 16 integrantes. De hecho, el kirchnerismo impugnó el desarrollo de la comisión porque entiende que sus plazos de funcionamiento están vencidos y que el DNU debería tratarse en los recintos de ambas cámaras.

Desde mañana 1 de marzo, cuando se inician las sesiones ordinarias, UxP tiene poder de fuego para que se abran los recintos: con juntar 10 firmas en Diputados y 5 en el Senado, las autoridades de ambas cámaras –Martín Menem y Victoria Villarruel, respectivamente– están obligadas a aceptar sus pedidos, aunque el peronismo no tiene los votos para conseguir quórum y voltearlo por su cuenta. Para ello necesita de los federales y los radicales, que acordando ahora con el oficialismo que funcionarios del Ejecutivo den explicaciones en la comisión, no acompañarían la avanzada kirchnerista.

Curiosamente con esa cuestión de los plazos coincidió Massot, pero aclaró que tanto Diputados como Senado podrían abocarse a votar el DNU en simultáneo al desarrollo de la comisión. De hecho la bicameral tiene más de cien decretos de otras gestiones sin tratamiento.

Massot le planteó como salida al Gobierno que el decreto se divida en distintas leyes para “salvar” sus reformas, luego de admitir que acompaña el capítulo laboral del decreto, que justamente está suspendido en la Justicia. “Es inminente el tratamiento de este DNU en los plenos, principalmente en el Senado donde hay mayorías para tratarlo y rechazarlo. Pero no quiero avalar que un gobierno crea que pueda gobernar sin el Congreso. No se puede rechazar esto sin reemplazarlo por una ley. En Diputados debemos abocarnos a su tratamiento en distintas leyes”, planteó.