Por: Delfina Mónaco

Después de que una disputa interna en el Frente de Todos terminara con la ausencia intermitente de la senadora Magdalena Goris, al oficialismo le preocupa no lograr el empate ante una posible votación reñida. Sin embargo, esto llegó también a oídos de Juntos que sabe que tiene una carta que le puede resultar útil de cara al futuro.

Todo parecía alegría en las elecciones pasadas cuando Eduardo “Bali” Bucca lograba arrebatarle la última banca en disputa por la Séptima Sección Electoral.

Lo que parecía un imposible tras la dura derrota en las PASO de septiembre, ahora abría una luz de esperanza para el gobernador Axel Kicillof, y la vicegobernadora y titular del Senado, Verónica Magario, quien definiría en caso de empate.

A pesar de las esperanzas, las elecciones internas del PJ bonaerense comenzaron a ser la antesala de lo que después se replicaría en todos los sectores del oficialismo: una grieta dentro del propio partido.

Esto es así porque después de las elecciones que definieron a Máximo Kirchner como titular del PJ de la Provincia, se tensó la relación entre el hijo de la vicepresidenta y Fernando Gray, actual intendente de Esteban Echeverría.

Esta discusión y puja de poder terminó llegando al Senado bonaerense, ya que uno de los 23 nombres con el que cuenta el Frente de Todos en sus filas es el de Magdalena Goris, quien también es esposa de Gray.

Por lo tanto, ya desde el recambio de senadores a finales de 2021, Goris no se presentó nunca en una sesión, lo que ante un hipotético empate, el oficialismo quedaría en desventaja.

Tal como lo confirmó CRONOS hace unas semanas, desde el despacho principal de Esteban Echeverría saben lo que significa esto, y están dispuestos a utilizar esta herramienta como carta de negociación con el oficialismo.

Sin embargo, las noticias dentro de los pasillos de la Legislatura corren rápido y ahora no solo Goris sabe que puede utilizar esto a su favor, sino que la oposición también es consciente de la banca que quedó vacía en varias oportunidades.

La semana pasada, en diálogo con CRONOS, la senadora del PRO, Lorena Petrovich, dijo: “Estaríamos 23-22,5 porque en el Frente de Todos hay una senadora que todavía no se ha hecho presente en lo que va del año, así que sabrán ellos explicar cuántos son”.

Por el contrario, hizo la “antítesis” con lo que pasa en su propio bloque: “Nosotros somos 23, con nuestras diferencias dentro del espacio que es una coalición”.

Cabe recordar que unos días atrás, la diputada bonaerense Débora Indarte tomó la decisión de “pegar el portazo” del bloque del Frente de Todos en la Cámara baja de la Legislatura por una interna del PJ, pero en este caso, en la ciudad de Mar del Plata.

Por el momento, desde Juntos se mueven como un bloque en conjunto que parece difícil de romper, y sus propias diferencias que se fueron acrecentando con el correr de los meses, y que intentaron mantener puertas adentro, parecen verse opacadas por las cada vez más ruidosas y mediáticas peleas dentro del oficialismo.