Con una inversión de 77 millones de pesos que estaban previstos en el presupuesto provincial, la ministra de Educación, Letizia Mengarelli, firmó esta semana la resolución que asigna más de 9 mil horas cátedra y 546 cargos de maestros de educación técnica (MET) para los 1º y 2º años de las escuelas secundarias.
La medida da respuesta a una serie de demandas históricas de la Asociación de Magisterio de Santa Fe (Amsafé), reafirma el cumplimiento del secundario obligatorio, logra que 142 de las 153 escuelas técnicas de la provincia que no tenían maestros de taller reciban los llamados cargos MET, y ataca las horas libres.
—¿Qué respuesta da a las fuertes críticas que el gremio y sectores docentes hicieron a la reforma curricular en el secundario y el planteo de horas mal asignadas y falta de cargos?
—No recibí del gremio ni un solo caso puntual respecto de estos dichos. Desde febrero pedimos que acerquen las situaciones concretas con el nombre de la escuela y el personal afectado, pero no tenemos ni una presentación. Son afirmaciones livianas.
—¿Qué novedad hay acerca de la asignación de horas cátedra para el secundario?
—Los cargos estuvieron votados en el presupuesto, se financiaron y lo que se hizo el jueves pasado fue firmar la resolución que los asigna a cada una de las escuelas. Son 4.718 horas para educación técnica, 4.297 para secundaria orientada y 546 cargos MET, lo que significa que de las 153 escuelas técnicas de la provincia 142 reciben horas y cargos MET que nunca tuvieron, porque eran técnicas que no contaban maestros de taller.
—¿Que inversión representan estas horas y cargos?
—Para este año son 77 millones de pesos que corresponden al 1º y 2º cursos del secundario. El año próximo se adicionarán los montos necesarios para ir progresivamente cubriendo el segundo ciclo del secundario y 6º año en el caso de las escuelas técnicas.
—¿Por qué llegan a dos meses de iniciado el ciclo lectivo?
—El trámite tiene algunas verificaciones que debe hacer el Ministerio de Economía y otras de Educación, pero las horas estuvieron previstas desde fines del año pasado en el presupuesto. También se llevó adelante un esquema de trabajo con directivos y supervisores, y hubo ajustes hasta último momento sobre el número de horas que se designaban, a qué escuelas y a qué espacios curriculares. Se regsitraron demoras y reasignaciones que las escuelas fueron definiendo.
—¿Cómo avanza la reforma curricular para el segundo ciclo del secundario?
—Este año se fijó la confección de los núcleos de aprendizaje prioritarios y estamos participando a nivel federal de ese proceso, que es la base sobre la cual se construyen los diseños curriculares de las provincias. Sobre finales de este primer semestre habrá una convocatoria de la Dirección Provincial de Educación Secundaria para pensar la estructura y luego ir a los contenidos cuando haya terminado a nivel federal la confección de los núcleos prioritarios.
—¿Se buscará dar prioridad a algunas orientaciones?
— Alentamos a nivel federal que haya una orientación en agro que no existe y Santa Fe tiene escuelas secundarias en ámbitos rurales. Tradicionalmente conocemos colegios agrotécnicos, pero no secundarios con orientación agraria. Eso vamos a impulsarlo en la medida en que las escuelas quieran tomar esta definición.
—Dadas las críticas a la implementación de los cambios en el primer ciclo, ¿cómo se va a llevar adelante esta segunda etapa, sobre todo el diálogo con los gremios y los docentes?
—Tenemos prevista una modalidad de trabajo que ya se va a comunicar a las escuelas. Los docentes saben que la cobertura de la estabilidad laboral está garantizada como sucedió para el ciclo básico. Serán mesas de consenso en torno de lo que los colegios ya tienen y en función de las modificaciones previstas dentro del marco federal.
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