Mientras los legisladores locales sesionaban virtualmente, afuera de la Legislatura cientos de manifestantes siguieron el debate para esperar la votación de la nueva ley de derogación de la iniciativa y celebrar cuando se decidió frenar la actividad que habilitaba a la firma canadiense Pan American Silver a avanzar en la extracción de plomo, plata y cobre en el marco del proyecto “Navidad”.

La propuesta de zonificación minera había sido apoyada por Arcioni, pero cuestionada con firmeza por los sectores representados por el movimiento ambientalista, que se oponen a la contaminación del ambiente.

La diputada del Frente de Todos Mónica Saso revirtió su voto a favor de la megaminería de la semana pasada, pero lo defendió al asegurar que muchas de los artículos en el texto incluían parte del “reclamo social” ambiental.

Además, manifestó que era legítimo que “la meseta tenga la oportunidad de dignificar a su pueblo para un desarrollo sustentable y su progreso”, en medio de críticas a “la demagogia oportunista” de quienes ahora se oponen.

Mas allá de su posición, durante su discurso dijo: “Quiero adelantar mi voto afirmativo a la derogación y que aprobemos un fondo de reparación histórica para la meseta”.

La sesión para tratar la derogación se realizó en modo virtual debido a los daños que sufrió el edificio del Poder Legislativo durante el estallido social de la semana pasada.

La diputada de Chubut Unido y exintendenta de Rawson Rossana Artero afirmó que “cambiar de opinión es de gente racional” y una “actitud de grandeza”.

Por su parte, María Andrea Aguilera, de la UCR, manifestó que el proyecto cuestionado “carecía de licencia social y de legitimidad” no solo del desarrollo minero, sino “de un gobierno”, al apuntar contra el gobernador.

Arcioni, el lunes por la noche, volvió sobre sus pasos y confirmó la decisión de derogar la ley de zonificación minera, mientras que anunció que impulsará un plebiscito para que los chubutenses se expresen a favor o en contra de la norma.