Por: Judith Santiago.

A pesar de sus beneficios, el reciclaje enfrenta todavía retos, principalmente en América Latina, donde esta práctica sigue siendo baja e insuficiente para lograr reducir el volumen de residuos o desechos generados día a día y lograr mitigar el cambio climático. 

Lo anterior, a pesar de que la contaminación por plásticos, residuos sólidos urbanos (como los desechos domésticos, electrónicos y orgánicos), así como materiales industriales no degradables, alcanzan niveles récord. 

Un informe de la Fundación Ellen MacArthur, señala que más de 8 millones de toneladas de plásticos terminan en los océanos cada año, lo que genera una crisis ambiental preocupante.

Según un informe de expertos, el reciclaje en América Latina podría reducir hasta un 30% de los residuos sólidos que se generan anualmente. Sin embargo, aunque muchos países han avanzado en este campo, las tasas de reciclaje son aún bajas en comparación con países europeos o de América del Norte.

Especialistas destacan que la falta de infraestructura adecuada, la carencia de incentivos para las empresas y la escasa educación ambiental, limitan el avance de esta práctica.

Han advertido que aunque algunas campañas gubernamentales y de Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) han buscado maneras de sensibilizar a la población, en muchas localidades, el reciclaje es considerado una práctica tediosa y sin incentivos o recompensas “atractivas” para los ciudadanos.

Millones de toneladas de residuos plásticos se acumulan año con año, poniendo en riesgo la sostenibilidad en los océanos donde termina una buena proporción de estos desechos. Foto: Freepik.

Baja conciencia 

Una encuesta de Ipsos encontró que menos del 50% de los latinoamericanos considera el reciclaje como una medida importante para combatir el cambio climático y reducir el volumen de los residuos. 

Este dato refleja una baja conciencia de la población sobre la importancia de reducir y gestionar adecuadamente los residuos. 

Según un estudio de Ipsos, una firma de investigación de mercado, realizado en seis países de la región, Colombia, Argentina y Chile son los países donde la población cree que es importante separar y reciclar los residuos. 

En cambio, México se encuentra rezagado en el quinto lugar, por encima de Brasil, que ocupa el sexto puesto.

Lo anterior a pesar de que México es el segundo mayor receptor de basura proveniente de Estados Unidos, con 154 mil 395 millones de toneladas en 2023, indica un reporte de Statista. 

El reciclaje es un proceso mediante el cual se recolectan, procesan y transforman materiales o desperdicios, evitando que éstos terminen en basureros o incineradoras. Bajo este proceso se transforman en nuevos productos.

Porcentaje de latinoamericanos que opina que el reciclaje es importante para combatir el cambio climático:

- Colombia: 50%

- Argentina: 43%

- Chile: 41%

- Perú: 41%

- México: 40%

- Brasil: 38%

En Colombia, la iniciativa de "Basura Cero" y la separación en origen han sido bien recibidas, con programas municipales que impulsan a los ciudadanos a separar residuos reciclables en sus hogares. 

En Argentina, el número de empresas recicladoras ha aumentado, así como la creación de espacios destinados a la recolección de materiales reciclables.

En Chile, la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP) ha establecido regulaciones para que las empresas gestionen el ciclo de vida de los productos que comercializan, promoviendo el reciclaje a nivel industrial y doméstico. 

Contribuciones regionales

En América Latina y el Caribe se generaron más de 2 mil millones de toneladas de residuos, tales como desperdicios orgánicos e inorgánicos, en 2022. 

Mientras que en países como China y Estados Unidos, las tasas de reciclaje son superiores que en la región de Latinoamérica. 

Según datos citados por Statista, la plataforma de datos de mercado, “Bolivia y Colombia fueron en 2023 los países con mayor capacidad para reciclar en la región, con un 34.4% y un 28.5% respectivamente”.

La investigación de Ipsos destaca que un 31% de la población mundial está de acuerdo en que su gobierno tiene un plan claro sobre cómo las autoridades, las empresas y las personas trabajarán estrechamente para tratar de mitigar el cambio climático. 

En cuanto a quién debe asumir la responsabilidad de actuar, los encuestados opinan que es una responsabilidad compartida entre el gobierno, las empresas y los ciudadanos. 

“En general, más ciudadanos afirman que el costo económico del cambio climático en sí será mayor que el costo de las medidas para reducirlo”, se lee en el reporte de Ipsos.

“Los ciudadanos generalmente no descartan la importancia de la acción individual, y hubo un fuerte consenso de que si todos hicieran pequeños cambios en su vida diaria, tendrían un gran impacto. Además, la mayoría no cree que el cambio climático esté fuera de nuestro control”, se lee en el informe.

Destaca el hecho de que aproximadamente un tercio de los encuestados a nivel mundial estaría dispuesto a pagar más impuestos de su ingreso para ayudar a prevenir el cambio climático. 

Cuando se les preguntó qué los motivaría a hacer un cambio, los ciudadanos respondieron que un incentivo financiero o una reducción de impuestos para compras ambientalmente responsables, o tener fácil acceso a información sobre las elecciones correctas.