El Concejo Deliberante de Santa Rosa rechazó por mayoría la Cuenta de Inversión 2015, que corresponde al último año del período de gobierno del exintendente Luis Larrañaga.

De esta manera, la última administración del PJ que pasó por la Municipalidad de Santa Rosa impuso una marca difícil de emparejar: ninguna de las cuentas de inversión en sus cuatro años de gobierno fueron aprobadas por el Concejo Deliberante.

Este jueves, el rechazo fue acompañado por los cinco concejales del oficialismo y la legisladora del FpV, Alba Fernández. Los cuatro ediles del PJ y el concejal de Pueblo Nuevo, Roberto Torres, votaron en contra.

Claudia Giorgis argumentó el rechazo aduciendo que había gastos realizados “sin contabilización presupuestaria”, “proveedores que se presentaban a cobrar sin que haya afectación presupuestaria para las erogaciones” y un “descalabro administrativo y contable” en las cuentas municipales.

También habló de la imposibilidad de conciliar movimientos bancarios con gastos realizados y un déficit de 8,4 millones de pesos.

Aunque la cuenta de inversión fue presentada por la actual gestión, los números corresponden al último año de la gestión del PJ en Santa Rosa.

Se completó de esta manera un hecho del que debe haber pocos antecedentes: ninguna de las cuentas de inversión de cada uno de los años de gestión de Larrañaga en la intendencia fue aprobada: la de 2012 recién se trató en octubre 2014 y fue rechazada, lo mismo que la de 2013 (tratada a fines de 2014) y la de 2014 (en noviembre pasado).

Cada uno de esos rechazos tuvo que ver con la relación de fuerzas en el CD (una parte del bloque oficialista se había “rebelado” y la presidente del cuerpo, Liliana Robledo, votaba con la oposición) pero también con la demora en la presentación de las rendiciones y dudas similares a las que expresó Giorgis en sus argumentos de la última sesión.

Ese “descalabro” en los números y rendiciones ya llevó a la actual gestión a presentar una denuncia penal por alteración de los índices de coparticipación que fue archivada por la Justicia provincial.

Pero además, desde el oficialismo ya están planteando tomar una “decisión política” el próximo año porque consideran que “hay tal descalabro de números y falta de datos que resulta casi imposible acomodar las cuentas”.