En la avenida Presidente Perón, entre el 300 y el 400, puede observarse, sobre todo en la tarde, como "nace" un río desde la junta del la cinta asfáltica, y a partir de allí, el agua comienza a correr buscando la pendiente.
MALES MAYORES
Como producto de la pérdida se pueden producir roturas en el pavimento, las que seguramente ocasionarán más de un inconveniente en la transitada avenida, precisamente una de las que da la bienvenida a Pehuajó a quienes ingresan por el acceso San Martín.
No es la imagen más deseable de la ciudad, al menos no la que pretendemos ver los pehuajenses y mostrar a los demás, pero lo cierto es que el "río" está y quien pase por el lugar podrá apreciarlo.
Lamentablemente, no es la única pérdida de esta naturaleza, quizá sí la más significativa por el volumen de agua y la ubicación de la misma, pero pareciera que tienden a ser "eternas" porque no se realizan las reparaciones.
MEJOR SERVICIO
Cuesta entender y sorprende que una prestataria que es tan puntillosa cuando alguien presenta una deuda, al remarcarla con los esperados intereses y enviar las correspondientes notificaciones a los deudores, no lo sea cuando del servicio se trata, para mejor decir, de las incomodidades que un servicio inapropiado y deficiente causa.
QUEJAS DE VECINOS
Además, no han sido pocos los vecinos que en nuestra redacción han señalado que al denunciar en ABSA una pérdida en sus veredas deben esperar un tiempo, por demás de exagerado, para que alguien concurra y realice la reparación que le corresponde a quien presta -y cobra- un servicio.
En algún caso, con la documentación de la primera denuncia y dos más realizadas a la vista, se puede apreciar que desde noviembre del año anterior un vecino sufre el problema y su vereda se presenta con baldosas despegadas, y cuando hay presión tiene un "río", "chiquito" claro está, pero propio.
QUE SE HAGA ALGO
Sería prudente que las autoridades tomen en cuenta lo que se detalla en la nota, y tengan la misma celeridad en solucionar los problemas que la que se aprecia al momento de demandar de los usuarios algún pago atrasado. No está mal que se reclame lo que se le debe, como tampoco que el servicio se preste de la mejor forma, algo que, lamentablemente no sucede.
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