En un contexto de pérdida de fondos nacionales, el gobernador sumó un desembolso de ingresos brutos; espera recaudar $155.000 millones; niegan que sea una respuesta a las peleas con Milei
Francisco Jueguen
En un contexto de fuerte tensión entre el Gobierno y las provincias, cuando Javier Milei decidió restarle fondos a Buenos Aires, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, decidió hoy obligar a las grandes empresas radicadas en ese territorio a pagar un multimillonario anticipo de impuestos.
Una vez conocida la medida dispuesta por ARBA –la agencia de recaudación de la provincia–, las empresas cuestionaron la decisión y advirtieron que existe “grave preocupación” en el sector privado.
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Según indicaron en la entidad que recauda impuestos en la provincia de Buenos Aires, con la mayor presión sobre 254 empresas, se espera recaudar $155.000 millones. Fuentes de la gobernación habían contado días atrás que con el retaceo de fondos por parte de Milei a Kicillof (la falta de actualización del Fondo del Conurbano, la quita de dinero para los subsidios a transporte y educación, o la eliminación del Fondo de Fortalecimiento Fiscal, entre otrs), la provincia perdía un estimado de $100.000 millones por mes.
“No es para compensar lo que quitó Milei. Esta medida estaba prevista en la Ley Impositiva que se aprobó en diciembre, previo al desastre que está haciendo Milei”, contaron desde ARBA a LA NACION. “Son herramientas que se pensaron a modo de paliar lo que podría suceder y sucedió, pero que son insuficientes para compensar los fondos que dejaron de enviarse”, agregaron en la entidad.
Hoy por la mañana, ARBA anunció que había reglamentado el artículo 136 de la ley 15479 (Impositiva para el ejercicio 2024). Allí había tomado la determinación de que haya un anticipo adicional del Impuesto sobre los Ingresos Brutos, que deben pagar este año “grandes contribuyentes” con actividad “en rubros concentrados de la economía”, y que se abonará en una sola cuota que vencerá el próximo 8 de marzo.
“Ese anticipo adicional abarca a aquellas empresas que reúnan, de forma concurrente, dos requisitos: revestir el carácter de grandes contribuyentes, dado su nivel de ingresos operativos, y desarrollar una actividad que corresponda a un mercado con un grado de concentración elevado”, informó la agencia.
Se determinó además que el monto a pagar por estos contribuyentes “equivaldrá a cuatro veces el importe del anticipo de Ingresos Brutos correspondiente a octubre de 2023. En tanto que, para quienes no hubiesen presentado declaración jurada o informado ingresos en ese mes, el adicional se calculará multiplicando por cuatro el importe del último anticipo no prescripto, incrementado en un 70%”, se precisó en un comunicado enviado a los medios.
El director de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA), Cristian Girard
ARBA notificará, a través del domicilio fiscal electrónico de cada una de las empresas alcanzadas por la medida, tanto el importe a pagar como la fecha de vencimiento, así como los datos que verifican su condición de grandes contribuyentes con actividad en un mercado de alta concentración, estimaron.
“Cuando la empresa registre saldos a favor de Ingresos Brutos, la liquidación será emitida por la diferencia que resulte adeudada, una vez computados los excedentes registrados por ARBA en la cuenta corriente del contribuyente”, dijeron.
“Al cumplir con este anticipo adicional del Impuesto sobre los Ingresos Brutos, las empresas se beneficiarán con una reducción de alícuotas en todos los regímenes de recaudación. Asimismo, no les resultará aplicable ningún incremento de alícuotas en función de categorías representativas de riesgo fiscal por un año, contado a partir del mes siguiente al que se haga el pago”, estimaron desde ARBA.
“Respecto de quienes incumplan con la obligación, la Agencia de Recaudación los incluirá en la máxima categoría representativa de riesgo fiscal. Además, las deudas correspondientes al anticipo adicional, sus intereses, accesorios y multas no podrán ser regularizadas mediante los planes de pago previstos en la Resolución normativa 36/23″, advirtieron desde ARBA.
“Grave preocupación”
La respuesta de las empresas llegó unas horas después a través de un comunicado de la Unión Industrial Argentina (UIA). “La UIA, la Unión Industrial de la provincia de Buenos Aires (Uipba) y la Asociación de Industriales de la Provincia de Buenos Aires (Adiba) expresaron hoy su grave preocupación ante la publicación de la resolución Nº 11-2024 de ARBA que obliga a realizar un anticipo del impuesto sobre ingresos brutos a las empresas que operan en la provincia de Buenos Aires como contribuyentes locales o por convenio multilateral”, escribieron.
Daniel Funes de Rioja, presidente de la UIAMauro Alfieri - LA NACION
“La recuperación económica de nuestro país debe necesariamente surgir del desarrollo productivo con generación de empleo formal y los incrementos de la presión tributaria y/o de la carga financiera al sector productivo dificultan el cumplimiento de este objetivo”, estimaron. Cabe recordar que la norma publicada hoy toma como base la facturación solo de octubre 2023 multiplicado por cuatro, lo cual significa que no contempla el impacto de la recesión que afecta la actividad industrial que fue de -5,6 contra el tercer trimestre del mismo año mientras que en los primeros meses de 2024 se evidencia una caída superior. La medida además quita capital de trabajo a la industria en momentos de caída de la actividad”, agregaron.
La alícuota de IIBB en la provincia está fijada para el sector industrial entre 0 y 1,5%. Sin embargo, dijeron, por la aplicación del régimen de recaudación y la acumulación de saldos a favor, algunas empresas terminan tributando una alícuota efectiva cercana al 2,5%. Los industriales pidieron rever la medida de Kicillof, que ya había aumentado el inmobiliario urbano hasta casi un 300% este año.
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