Faltan menos de dos semanas para la asunción como nuevo presidente de los argentinos de Javier Milei. Y en su entorno se trabaja intensamente en los detalles de cómo será su jura y el traspaso del mando el 10 de diciembre.

Esa tarea quedó a cargo del excanciller de Mauricio Macri, Jorge Faurie. El lunes junto a un grupo de colaboradores estuvo en la Casa Rosada donde recorrió los distintos salones con la idea de diagramar un posible escenario. Experto en Ceremonial, Faurie no quiere dejar nada librado al azar, sobre todo lo relacionado con la seguridad del presidente electo.

El diplomático contó este miércoles en radio La Red que luego de la jura al mediodía en el Congreso de la Nación que establece el artículo 93 de la Constitución Nacional el traspaso del mando donde el nuevo mandatario recibe los atributos presidenciales -la tradicional banda y el bastón- posiblemente también se realice allí. “Tradicionalmente era siempre en la Casa de Gobierno en el Salón Blanco. Desde hace un tiempo ha habido otras posibilidades de recibirlo en el mismo lugar donde jura. Eso en función de tiempos, de expeditividad, para hacerlo más rápido”, describió.

Por eso, según Faurie -que entre otros eventos organizó la Cumbre del G 20 de 2018 en Buenos Aires- se analiza hacer “una ceremonia unificada no acelerada, no compactada, simplemente que sea en el mismo lugar” porque “evita un traslado”. Macri recibió la banda de parte de Federico Pinedo, entonces presidente provisional del Senado, en el Palacio Legislativo, en 2015.

“El presidente saliente tiene que manifestar su conformidad con lo que le propone el presidente entrante, dónde lo hace y recibe y demás, y el presidente saliente, a través de sus colaboradores, ya ha hecho saber su disponibilidad para adecuarse al programa que le proponga la parte del presidente entrante”, explicó.

En breve se dará a conocer el cronograma de las actividades de ese 10 de diciembre. Por lo pronto, esta tarde en Asamblea Legislativa en el Congreso se proclamará a la fórmula que integran Milei y su vicepresidenta Victoria Villarruel.

Faurie sostuvo que “hay un grupo de gente de la Cancillería y de Ceremonial de la Presidencia y de los organismos de la seguridad de la Ciudad de Buenos Aires que van pasando por los lugares donde se realizarán estos eventos”, que están ajustando los detalles de la organización de los pasos que se darán el domingo 10.

En el Congreso, Milei “será recibido por una comisión integrada por la presidenta electa (Victoria Villaruel) y otros parlamentarios”.

En ese trabajo conjunto figura el envío de invitaciones para delegaciones extranjeras que serán saludadas por Milei en la Rosada, luego de la jura y el traspaso de la banda que hará el presidente Alberto Fernández. Ya se cursaron el lunes más de 200 invitaciones y entre los que confirmaron su asistencia están los mandatarios Luis Lacalle Pou (Uruguay), Gabriel Boric (Chile) y Santiago Peña (Paraguay).

Resta saber a quién enviará el presidente Luis Inacio “Lula” da Silva, luego de los cortocircuitos entre el líder libertario y el brasileño que en los últimos días trataron de zanjarse con la visita de la futura canciller Diana Mondino al vecino país y las gestiones del actual embajador argentino Daniel Scioli. Si se espera que el expresidente Jair Bolsonaro llegue a Buenos Aires con una nutrida comitiva.

Otro caso sin resolver es el de Venezuela. Cuando le consultaron a Faurie se limitó a responder que “Venezuela es un país que tiene embajada aquí y nosotros tenemos embajador en Caracas”.

Además del saludo protocolar a los invitados especiales que se haría en el Salón Blanco, en Balcarce 50 se efectuará la jura de los nuevos ministros, en principio en las instalaciones del Museo del Bicentenario. A las 17.30 se haría el Tedeum en la Catedral Metropolitana y a las 19, una función de gala en el Teatro Colón. Se evalúa, además, el armado de una cena para las delegaciones extranjeras.

Milei realizó gran parte de su campaña proselitista en autos o camionetas descapotables. Faurie, quien está jubilado y ya participó del traspaso envuelto en polémicas entre Cristina Kirchner y Macri en 2015, dijo que se evaluó la posibilidad de usar el “Cadillac que está en el Museo del Bicentenario, ya reparado, pero tiene el obstáculo de que sacarlo del Museo es complejo”.

Ese auto fue comprado por Juan Domingo Perón en 1955 pero nunca fue utilizado por él que fue derrocado en septiembre de ese año. Está en exhibición desde fines de enero de 2018 y Alberto Fernández eligió un auto particular cuando asumió en 2019. Deslizó Faurie que “Milei ha hecho toda su campaña en un vehículo abierto y podría ser una alternativa”.

Aunque aclaró que “el presidente saliente tiene que manifestar su conformidad con lo que le propone el presidente entrante donde los hace y recibe y demás y el presidente saliente a través de sus colaboradores ha ya hecho saber su disponibilidad para adecuarse al programa que le proponga la parte del presidente entrante.