“Yo veo una dureza en esta idea de la cuarentena encerrada que asusta. En primer lugar cuando se extendió la cuarentena durante tanto tiempo, se hizo un daño económico enorme. Hoy eso lo vemos en la calle, en los restaurantes y la industria. Esa idea de que era la salud o la economía nos

hizo un daño enorme, porque somos una sola cosa”, sostuvo Julio Bárbaro.

En diálogo con Radio Mitre Mendoza, el analista político dijo que “hemos llegado al rídiculo de la ideología, sobre todo cuando se habla de que pedir por las clases presenciales es de derecha. Es un sinsentido total”.

“La cuarentena es una bala de plata que no se podía ejecutar en primer momento. Cerramos todo cuando teníamos un bajo nivel de contagios y muertos”.

Además sobre la campaña de vacunación en sí, Julio Bárbaro dijo que “ha sido un proceso muy doloroso. Me parece que se hizo todo mal, desde la extensión de la cuarentena hasta la campaña de vacunación”.

Sobre la interna en el Frente de Todos, el histórico dirigente peronista señaló “Este es un camino muy parecido al del final de menemismo. La fractura no es el adversario político, sino interna. Un día Guzmán pide ayuda a los europeos y al otro día sale un grupo a decir lo contrario. Hoy somos unos de los países con mayor inflación y empobrecimiento. Llevamos 45 años en caída. Hicimos pedazos un país que tenía apenas un 4% de pobreza. Si la culpa es del peronismo o del radicalismo ya no es el tema”.

En este sentido agregó “este es uno de los Gobiernos más grises que tuvo la Argentina. No sabemos dónde vamos y hay una desilusión total. En Argentina la política ha fracasado en sus dos versiones, porque tampoco ha aportado soluciones la oposición. Acá fallan los dos sectores”.

Consultado sobre el escenario electoral, Julio Bárbaro señaló que “seguramente las próximas elecciones lo dejen muy debilitado al Gobierno. Creo que va a quedar como la primera minoría en el Congreso. Tampoco creo en ir todos contra el oficialismo. No sirve que se junten todos, porque en la Argentina hace mucho que no se discuten ideas”.

“Si en el kircherismo se radicalizan van a acelerar su propia destrucción. Insisto, están en el final, cada uno tiene sus broncas. Hay una frivolidad en la política brutal, este hecho de que los asesores sustituyeron a la mística. Cuando es un mundo de asesores es porque los que ejercen carecen de sueños propios, los piden prestados”.