Es un proyecto de un diputado massista, Marcelo Nasif, que le pide una elección al gobernador Gerardo Morales "para decidir si debe seguir presa o no".
La detención de Milagro Sala suma otro capítulo a la larga serie de equívocos y polémicas que se desataron después de que el poder judicial de Jujuy ordenara su prisión preventiva, hace 11 meses. Después de los cruces entre el gobernador radical Gerardo Morales(respaldado por Cambiemos) y los organismos internacionales que reclamaron por su liberación, ahora un legislador provincial propuso someter el caso de la líder de la Tupac Amaru a una "consulta popular".
Marcelo Nasif, del bloque Primero Jujuy, elevó el proyecto ante la Legislatura provincial, con el respaldo del diputado del Parlasur Alberto Asseff. El objetivo es que los ciudadanos "se pronuncien por el sí o el no respecto a la posibilidad de que Milagro Sala, libre, amenazará testigos, entorpecerá e impedirá que la Justicia la investigue por hechos de corrupción", según escribió.
En los considerandos, el legislador cuestionó a la Organización de Estados Americanos (OEA) y a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ambos organismos internacionales que reclamaron la liberación de Sala. Según Nasif, esos dictámenes no son producto de un profundo afán de hacer justicia, sino son consecuencia de lobbys de funcionarios, políticos y periodistas de la administración anterior, con el objeto de obtener un rédito político".
"En este sentido debemos destacar que, sin perjuicio de la importancia que tienen los organismos internacionales, no es menos cierto que estos en reiteradas oportunidades, en las cuales la Argentina y sus ciudadanos (a lo largo de nuestros doscientos años de historia) necesitamos de ellos, no estuvieron a la altura de las circunstancias, debiendo citar a modo de ejemplo las violaciones de derechos humanos que sufrían muchos ciudadanos de nuestra nación por el solo hecho de ser militantes políticos, gremialistas, estudiantes, etc, durante la dictadura militar", agregó Nasif en el párrafo más insólito de su presentación, ignorando las conocidas misiones de la CIDH durante el llamado "proceso".
En una entrevista con el portal Jujuy Online, el referente del massismo en la provincia afirmó: "Esta actitud de los organismos internacionales es agresiva, porque están opinando sobre la situación de Milagro Sala poniendo en duda si el Poder Judicial de nuestra provincia la ha puesto en prisión de manera subjetiva o caprichosa". "Entendemos que los jujeños no hemos sido tenidos en cuenta de ninguna forma;pero sufrimos durante muchos años atropellos, violencia, hechos de corrupción, que lastimó el pensamiento de los jujeños y hubo personas que se empobrecieron y como consecuencia de esto, la justicia decidió su detención porque podría fugarse o interferir en la investigación", agregó.
El legislador aclaró en un comunicado que el plebiscito que impulsa tendría carácter "no vinculante, como los dictámenes internacionales aludidos", para "no entorpecer la independencia del Poder Judicial constitucionalmente consagrada".
Repudio. Dirigentes que integran el Comité por la Liberación de Sala rechazaron la iniciativa y consideraron que "constituye un nuevo escándalo y confirma que Milagro Sala es una presa política", por lo cual notificarán del proyecto a los organismos internacionales.
"Con esta iniciativa, la provincia de Jujuy da un paso más hacia la intervención federal de los tres poderes del Estado", señalaron desde el comité a la agencia DyN. Así, ratificaron la iniciativa que diputados nacionales del kirchnerismo presentaron hace una semana en el Congreso para intervenir la justicia provincial.
El exjefe de gobierno porteño Aníbal Ibarra, integrante del Comité, señaló que el proyecto de Nasif "es escandaloso y demuestra el carácter político de la privación de la libertad de Milagro Sala".
"En un estado de Derecho no se define la libertad o detención de las personas ni por encuestas, ni por lo que opina la gente ni por un referéndum", añadió.
El abogado Eduardo Tavani opinó que "se trata de una práctica fascista. No son los humores públicos los que deben resolver sobre la libertad o no de una persona. Es un escándalo".
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