En un encuentro poco vistoso, el "milrayitas" cumplió el objetivo de sumar de a dos, superó a Obras por 68 a 58 y mantiene la ilusión de quedarse con el "uno".
Le costó mucho a Peñarol el arranque del partido, no estaba fino en los ataques y permitió que Obras corriera con Smith que le metió cuatro puntos seguidos. Pero habían pasado 2’30” cuando el americano sufrió una contractura en el gemelo y debió dejar el campo de juego. Sin embargo, nada cambió, siguió siendo superior el local, Jasen desequilibraba y el tiro externo del “milrayitas” no aparecía, hasta que Leo Gutiérrez “clavó” una bomba y Boccia apareció con cuatro para que se fuera al descanso abajo por 4: 17-13.
Al regreso del banco se empezó a ver al Peña que se esperaba, con mayor nivel de juego, dos triples (Campazzo y Weigand), para en un abrir y cerrar de ojos revertir el resultado y pasar al frente por 22 a 21. El ingreso de Sosa le dio otro triple al “milrayitas” que empezó a estirar la diferencia y a marcar supremacía. Pero Obras estaba en partido, Juan Manuel Fernández se hizo cargo de las ofensivas y no dejó que los marplatenses se escaparan, dejando otra vez el partido a uno (28-29) a falta de 2’19” para el cierre. En el tramo final los dos abollaron el aro, mantuvieron los bajos porcentajes de efectividad y se fueron al vestuario con Peñarol arriba por 32 a 31.
A la vuelta del entretiempo, Peñarol estaba muy bien en defensa e impidió que Obras anotara en los primeros dos minutos. Igual, le costó mucho anotar y por eso no pudo escaparse (35-37). El partido era malo, con goleo bajo y demasiadas imprecisiones de ambos lados. En el peor momento del juego, aparecieron un triple de Sosa y otro de Weigand que le dio la ventaja de 8 (38-46) a los marplatenses que tienen una jerarquía individual que marca diferencia. Y esa distancia la lograron en los minutos finales, para llegar al último descanso corto con una nada despreciable ventaja de 13 puntos: 42-55.
El conjunto de Silvio Santander quería salir a descontar para llegar a un final cerrado y en 4’ metió un parcial de 8-2, sobre un Peñarol que se relajó demasiado y se quedó sin gol. Fernando Rivero se enojó cuando Jasen le metió una gran tapa a Weigand y en la contra anotó Field para seguir limando la diferencia (52-57). Al igual que en los parciales anteriores, Sosa rompió de afuera un momento malo de su equipo y le dio respiro a 3’30” del final. Así y todo, más por defectos de Peñarol que por virtudes propias, Obras tuvo oportunidades de forzar un cierre más parejo, pero las desperdició con tiros cómodos errados. Cuatro puntos de Gutiérrez terminaron por sentenciar la historia, el “milrayitas” sacó once (56-67) a un minuto del final y el partido se terminó con ventaja de 10 (58-68) para los de Fernando Rivero, que siguen sumando, están punteros hasta que Regatas complete sus partidos y sigue soñando con el “uno”.
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