“En relación al título de NORTE del domingo 26 de Agosto de 2012 que dice “El Gobierno pide a la Justicia celeridad en los juicios para poner límites a la inseguridad”, su subtítulo de la página 8, “Capitanich promoverá juicios más rápidos ante marcada demora procesal en la justicia” y lo justifica diciendo que “...Para dar ejemplo de la necesidad de esta reforma dio algunos datos de expedientes judiciales.... En el Juzgado Correccional Nº 2 ingresaron 187 expedientes y 39 sentencias...”; tengo el deber ético de corregir los números estadísticos y expresar, en homenaje al equipo de trabajo que lidero en condición de Juez, que en el año en curso, hasta el 8 de agosto, se dictaron en este Juzgado Correccional Nº 2, 146 sentencias definitivas, donde se utilizaron los mecanismos legislados, algunos a nivel nacional (Código Penal), y otros provenientes de la legislación provincial (Código de Procedimiento Penal y ley de Mediación Penal).

En el 2011 ingresaron 233 expedientes y culminaron con resoluciones definitivas 158. Sus contenidos respectivos están a disposición, para quien desee ejercer el control republicano de los actos de gobierno (art. 1 º de la Constitución Nacional), en la sede del Tribunal sito en calle Córdoba Nº 115, primer Piso, ciudad. Acompaño sin reservas la opinión del Gobernador en el sentido que debemos mejorar los tiempos procesales. La utilización de juicios, con plazos acotados y perentorios, en procesos de flagrancia (aplicables a causas de competencia criminal o correccional) es, precisamente, el tema de investigación que encaro en la Maestría en Magistratura y Derecho Judicial de la Universidad Austral. Puedo decir que la flagrancia y cuasi flagrancia están reguladas en el Código Procesal Penal vigente (arts. 274 y 275), sólo resta establecer de qué modo simplificamos el juicio en estos supuestos. Como no es mi costumbre criticar sin propuestas coloco para el debate abandonar el sistema decimonónico de papeles que forman expedientes, sustituyéndolo por registros informáticos, la oralidad de todo el proceso y la video filmación como mecanismo de control” propone.