• Según supo APFDigital, instó a trabajar de “manera sistemática” para evitar “llenar las cárceles alocadamente y proteger al narcotraficante”.

Este martes a la tarde se reunió la Comisión de Seguridad del Senado y abordó el proyecto para combatir la venta de droga en baja escala (narcomenudeo).

Al encuentro fueron invitados el intendente de Concepción del Uruguay, José Lauritto, el Juez Federal de Paraná, Leandro Ríos, y el juez Federal de Concepción del Uruguay, Pablo Seró, funcionarios policiales y la ministra de Salud, Sonia Velázquez.

Ríos fue uno de los que expuso sobre el tema: “Nos enfrentamos a un negocio ilícito con una rentabilidad increíble. En esa organización hay una franja muy vulnerable que es la carne de cañón: los kioscos en los que se vende droga”.

“A partir de esos puntos de venta podemos llegar hasta la organización criminal, pero si eso se cauteriza rápida o alocadamente y sin preguntarse qué hay detrás de ese kiosco, lo que se hace es preservar al verdadero delincuente organizado, que es el narcotraficante”, sostuvo.

En tal sentido, consideró que “es muy riesgoso llenar rápidamente las cárceles de gente que incluso es víctima del propio delito porque tiene problemas de adicciones muy fuerte”.

Por ello, planteó que uno de los inconvenientes es que “se trabaja de modo atómico, no con una mirada sistemática sobre el tema”. De este modo, invitó a “pensar el problema de otra manera” y se refirió a las armas.

“La sociedad esta armada. Cuando se suele decir que en los barrios las muertes se producen por la droga, hay que decir que se producen por la droga y también por las armas. Pero sin embargo, desde la Justicia -tanto Federal como Provincial-, no hay una política para enfrentar esto en tanto criminalidad organizada”, apuntó.

“Vamos un poco al ritmo de lo que la policía va marcando: vamos a un lugar, allanamos en un lugar, en dos o tres lugares, se secuestran algunas armas, etc, pero la sociedad sigue armada y las bandas en los barrios siguen armadas”, enfatizó.

En este marco, se refirió a la importante territorialidad que tienen algunas bandas delictivas: “En el Juzgado Federal durante estos dos o tres últimos años hemos imputado y detenido a miembros de bandas que tenían un gran poder de territorialidad: Castrogiovanni, Herlein, Caudana, Celis, Bernal, etc. ¿Cómo llegamos a desmantelar esas bandas? Muchas veces ingresando por los puntos de venta y preguntando quién provee, aunque a veces no se quiere decir y otras directamente ni se sabe. Estoy seguro de que si se empieza a detener alocadamente sin hacerse esa pregunta, quién provee, perdemos todo el hilo de la investigación”.

“Los soldaditos son soldaditos porque son fungibles. El negocio va a continuar en la medida que no lleguemos al proveedor y al organizador, que no tiene una vinculación física con el estupefaciente, explicó.

En otro tramo de su exposición, Leandro Ríos aseveró: “Me permito señalar que esto es un negocio, que hay que pensarlo desde la lógica del negocio y atacarlo de ese modo”.

“Hay que pensar cómo atacar ese ilícito y eso requiere una mirada sistemática, no atómica de ir y detener gente por una actividad de venta porque con ese movimiento estamos protegiendo al narco”, remarcó el Juez Federal.

• Aportes

Cuando fue consultado por los senadores acerca del proyecto, consideró que “sería interesante tener alguna articulación reglada entre la Justicia Federal y la Provincial de modo tal de que algún resorte legal dé un orden de prioridades”.

Lugo realizó otro aporte: “Le daría mayor autonomía a la Dirección de Toxicología para que puedan manejar cierta información e impedir que ésta se filtre”.

“Toxicología debería ser como una pequeña DEA. La estructura que tiene la Policía hace que todos sepan y estén informados sobre todo en forma permanente y eso genera el riesgo de que la información se filtre”, dijo Ríos.

Diferenció este modo de trabajo con el que lleva a cabo la Policía Federal, “donde el trabajo de investigación se realiza entre pocas personas, y cuando hay que ir a territorio y llevar cien efectivos, ninguno de ellos sabe de qué se trata la investigación”.

Finalmente consideró que “el objetivo de eliminar el estupefaciente de los barrios, es muy difícil”, aunque destacó dos puntos a favor que tiene la provincia: “Todavía no tenemos producción de estupefacientes y creo que no hay un copamiento total de los órganos de decisión política por parte del narcotráfico”. En este último sentido, destacó la necesidad de que salga una Ley de Financiamiento de los Partidos Políticos para evitar que se filtre ahí el dinero de la criminalidad organizada”.