Por: María Gabriela Arteaga.

El desafío del Covid-19 en las operaciones centró el discurso del empresario Juan Claro, presidente del directorio de Coca-Cola Andina, en una carta contenida en la memoria anual de la compañía.

"Este año 2020 nos desafió a reflexionar sobre los estilos de vida que llevamos e instaló el paradigma de la 'nueva normalidad'". Así inició el repaso por el cambio en los hábitos de consumo y en los canales de distribución que dejó la pandemia, y pasó a detallar cada uno de los esfuerzos de la firma por afrontar a las exigencias.

"En Coca-Cola Andina nos propusimos superar el escenario de crisis y salir fortalecidos con nuestra capacidad de adaptarnos a situaciones adversas. Aprendimos a reconocer y valorarnos como una compañía resiliente, pues fuimos capaces de reinventarnos, adaptando nuestras relaciones laborales y nuestros procesos con flexibilidad, compromiso y responsabilidad social. Todo esto sobre la base del trabajo de equipos de alto rendimiento, la solidaridad y el cuidado por la salud" de todos, escribió.

Destacó cada una de las alianzas forjadas en el difícil período como, por ejemplo, el programa de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), al que aportaron con financiamiento para la compra de ventiladores mecánicos y cajas de alimentos.

Añadió que "quizás una de las acciones más destacadas de la compañía fue el desarrollo de la app 'Mi barrio Mi almacén', que se transformó en un vehículo de apoyo social efectivo para reactivar la economía local, conectando a los almacenes de barrio con sus clientes y la comunidad, a través del uso de herramientas digitales". Esta plataforma permitió a la empresa entregar unas 18.000 cajas digitales de alimentos, dijo.

Los cambios mayores 

Además de modificaciones a la operación en sí misma para garantizar la distribución y evitar  contagios dentro del equipo, Claro destacó la migración que sufrieron los consumidores hacia empaques de consumo familiar y retornables. "Asimismo, se registraron cambios en el mix de canales, con gran disminución del volumen de ventas del canal on-premise, explicada por el cierre de restaurantes y bares, el que en parte fue compensado por el fortalecimiento del canal tradicional que, por su capilaridad y cercanía, cumplió un rol clave en el abastecimiento de nuestros consumidores, sumado al impulso de las ventas del canal online".

A todo ello se sumaron adaptaciones que permitieron fortalecer la gestión financiera, dijo. "Logramos estructurar un plan de costos y continuidad operacional robusto, con una profunda revisión de los gastos y priorizando el plan de inversiones, todo lo que nos permitió mantener un flujo de caja saludable, una alta liquidez y sólidos resultados financieros".

Así, aseguró que, a pesar de la crisis, el año 2020 terminó de forma exitosa, y dijo tener "confianza de que en 2021 lograremos avanzar en todos nuestros propósitos, capitalizando los profundos aprendizajes" que dejó el ejercicio anterior.

Para cerrar, dedicó unas palabras para recordar al empresario José Said, quien falleció en julio de 2020. "Como accionista y destacado empresario, fue un hombre que vivió y marcó valores fundamentales, como el trabajo colaborativo y bien realizado, la importancia de la familia, y la lealtad. Su preocupación constante fue asegurarse que su gestión empresarial fuese en directo beneficio de la sociedad, cosa que en esta mesa que presido, intentamos continuar haciendo. Un gran empresario, ciudadano y amigo, que continuará para siempre inspirando el trabajo y desarrollo de la Compañía", escribió.