Jorge Brito: "Si ser oficialista es decir que tengo mucho optimismo, soy oficialista"

Jorge Brito:

El dueño del mayor banco privado de capital argentino se define como "banquero peronista", y asegura que fue "perseguido" en la era Macri.

—¿Vio “El robo del siglo”, sobre el atraco al Banco Río de Acassuso?

—No, veo poco. Lo último que vi fue Los dos papas.

—Los que ven la película se preguntan si es más delito fundar un banco que robarlo. ¿Qué les responde?

—Te juro que nunca lo escuché, soy medio Muppet.

Jorge Brito tiene 67 años y como dueño del mayor banco privado del país, el Macro, su nombre es sinónimo de negocios financieros. Sin embargo, también es el único autoproclamado “banquero peronista”, votó a Alberto Fernández y de hecho, acaba de poner detrás de su escritorio en el despacho de la megatorre que estrenó hace poco en Retiro una bandera argentina enmarcada que dice: “Bandera del general Juan Domingo Perón que lo acompañó desde su exilio del país hasta el día de su muerte”. Asegura que fue “perseguido” durante el gobierno de Mauricio Macri durante el que debió pedir licencia por las investigaciones por corrupción en torno a la imprenta Ciccone, evalúa más grave la exacerbación de la grieta que la herencia económica que legó Cambiemos, pero al mismo tiempo, reconoce que los bancos fueron claros ganadores durante su mandato.

—¿Qué evaluación hace del Gobierno?

—Las evaluaciones económicas son subjetivas. Para mí fue importante demostrar con la Ley de Emergencia Económica que la Argentina necesitaba ir al equilibrio fiscal y comercial. Antes se discutían en el mundo los superávits gemelos. Hoy ya no se discute más. Hoy para poder repartir primero tenés que generar. Y para generar tenés que tener un país con superávit fiscal o ser Estados Unidos y que te financien. Tenés que atraer inversiones para que las inversiones generen trabajo para que el trabajador tenga un salario digno y pueda consumir y haya una rueda. Lo ha dicho el Presidente, que cuando él estuvo en un gobierno siempre tuvo superávit gemelos.

—¿Cómo lo califica de 1 a 10 en este tiempo de gestión?

—No soy quién para calificar a nadie. Entiendo que va por el camino correcto. Lamentablemente el gobierno anterior dejó a la Argentina en una situación económica muy mala, entonces reconstruir el aparato productivo y el salario real no va a ser fácil. Va por el camino correcto para llegar a lo que necesitamos como país, volver a tener gente que tenga salarios dignos.

Jorge Brito pidió licencia como director del Banco Macro

—Colegas suyos del establishment tenían temor por el regreso del kirchnerismo. ¿Lo comparte? A usted lo escracharon por haber comprado dólares y se enfrentó con Cristina Kirchner.

—Un empresario no tiene que ser obsecuente con el poder de turno. Si a mí un día el Presidente me invita a tomar un café y le digo las cosas y el Presidente se enoja y te dice que liderás la corrida cambiaria, a mí no me preocupa. A mí nunca me persiguió el gobierno kirchnerista. Me habrán dicho cosas, sí, son públicas. Una cosa es que vos hables sobre una persona y den su opinión, y a nadie le gusta que el poder de turno hable no bien de vos. Pero otra cosa es que te persigan judicialmente, y yo no sentí eso. Sí lo sentí en el gobierno de Macri.

—¿Usted dice que Macri lo persiguió judicialmente?

—Soy una persona que trata de no guardar rencores, digo el gobierno anterior.

—Pero la investigación avanzó porque un testigo arrepentido de la causa Ciccone, Alejandro Vandenbroele, dijo que usted le pagaba para que no hablara sobre su participación en el entramado, además del tema de que un ex gerente de su banco, Máximo Lanusse, manejó la imprenta.

—Vandenbroele no cumplió como testigo protegido, nada de lo que dijo lo pudo probar, y ya pasó un año. La Cámara ya dictaminó que no estoy más procesado.

—¿Lo persiguió un gobierno empresario?

—Yo no diría que era empresario, solo se le puso el mote. Pero el Presidente hablaba mal de todos los empresarios, tenía un resentimiento contra todos los empresarios.

—¿No expresaba a una parte de la sociedad que ve corporaciones con privilegios también?

—No, honestamente. El único privilegio era el de Mauricio Macri. Llegó al poder para limpiar su nombre.

—¿Macri tenía un problema con usted?

—No se lo pregunté nunca. Nos conocimos mucho hace muchos años. Yo era presidente de la Asociación de Pádel y él era el vicepresidente. Lo conozco muy bien. Desde que asumió como presidente nunca hablamos.

—¿Volvió el kirchnerismo o es un gobierno del peronismo?

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—Es un gobierno del peronismo, a mí no me gusta hablar del kirchnerismo, es una parte del peronismo. Yo como peronista que soy me gusta hablar del peronismo. Y cuando el peronismo no fue unido perdió las elecciones.

—¿Volvieron mejores?

—No es eso. Yo soy peronista y creo en el peronismo. Ya el general Perón lo dijo, es un movimiento, es izquierda y es derecha.

—¿Lo ayudó a Sergio Massa, su amigo, a tomar la decisión de unirse al Frente de Todos?

—Se han hablado muchas cosas. Soy amigo de Sergio y de su familia, lo quiero mucho. Claramente te estaría mintiendo si cuando hablás con una persona no le decís que el peronismo unido es una necesidad.

—¿Hay muchos banqueros peronistas?

—Creo que no, no lo sé.

Dedos en V

—¿Cuándo se hizo peronista?

—Desde antes de la facultad. Ahí tenés unas ganas de ser…, pero empecé a militar en la Facultad de Ingeniería de la UCA y ahí hicimos la JUP-UCA. Eramos cinco (risas).

—Como peronista, ¿votó a…?

—... a Alberto.

—En enero de 2016 usted decía que “con la brocha gorda estaba en un todo de acuerdo con Macri” y que dependía de Macri el que volviera Cristina. ¿Qué pasó?

—Los cuatro años de Macri fueron muy malos para la Argentina porque no solamente le fue mal en lo económico, que uno muchas veces puede equivocarse, lo peor que pasó en la Argentina fue esta grieta que dejó abierta y que profundizó.

—Usted apoyó a Néstor Kirchner, se enfrentó con Cristina, sí, pero luego elogió a Macri y ahora apoya a Alberto Fernández. ¿Cómo se lleva con el mote de empresario oficialista?

—Yo creo en la Argentina y tengo todos mis activos invertidos acá. Creo que si alguna vez me convoca el Presidente o el ministro tengo que decir la verdad. Y si me dicen oficialista por la nota que me estás haciendo, yo te dije la verdad, no es para que me aplaudan o puteen, me importa un carajo. Digo lo que pienso. Si ser oficialista es decir en este momento que tengo mucho optimismo por el futuro de la Argentina, soy oficialista.

—¿Mandará Alberto o mandará Cristina?

—Creo que manda el Presidente.

—Como banquero peronista usted sabrá que el peronismo no tiene dos líderes.

—Claramente es así. El peronismo siempre tuvo un líder. Nadie discute el liderazgo de CFK, pero ha delegado su posición de presidenta de la República en Alberto Fernández y la ejerce. El futuro de la Argentina va a ser el éxito del gobierno de Alberto, lo que lo va a ir posicionando como líder del peronismo. Y no va a tener a Cristina en contra para que le vaya mal. Esas teorías conspirativas no las entiendo.

Deuda

—¿Cómo ve la renegociación de la deuda que se plantean cerrar para el 31 de marzo?

—Es central. Para que Alberto tenga una buena gestión económica y pueda empezar a crecer y producir puestos de trabajo necesitamos una renegociación de la deuda, y entiendo que está todo alineado para que eso se dé. El gobierno anterior tuvo que ir al FMI y que le diga el Fondo el ajuste que tenía que hacer, y este gobierno entendió voluntariamente que tenía que tener equilibrio fiscal. Hay una diferencia que resalta el Presidente: él ordenó las cuentas por convicción. Para el 31 de marzo puede estar encaminada, pero cerrada, no. Ojalá me equivoque.

—¿Cómo impactaría un default de la deuda bonaerense?

—Es una mala noticia para el gobierno nacional y para todos. Entiendo que van a llegar a una solución.

—Usted me dijo en 2016: “Kicillof no entiende nada, cree que el mercado cambiario lo manejan tres tipos”.

—No terminé bien con Kicillof en aquellas épocas, pero como te dije antes, al ser una persona de diálogo volví a hablar con Kicillof varias veces en los últimos dos años, es una persona inteligente. Posiblemente tengamos distintas formas de pensar, pero aprendió mucho.

—Dice que hubo un desastre económico y más grieta con Macri, pero basta ver los reportes de Bloomberg para ver la que ganó la banca en estos cuatro años.

—Es muy sencillo. Generalmente con toda la plata que entra a un país, se habla de la banca. ¿Qué pasó en estos cuatro años? Venía mucha plata del exterior, se vendían los dólares, se colocaban en pesos. Ganaban 30% o 40% en el BCRA y se iban. La banca colocó la plata en esas letras e instrumentos que generó el Gobierno para los capitales especulativos de afuera. Ni siquiera fue en lugar de prestárselo a la producción, porque la producción no podía tomar los préstamos. O yo colocaba la plata, o me la llevaba a mi casa o la colocaba en Lebac. Muchos banqueros pensaban que no se iban a pagar, pero administrás fondos y tenés que invertirlos en algo, esa fue la rentabilidad de la banca. Ahora, también vamos a tener ajustes importantes de las empresas que dejó la era Macri, mirá los balances y te vas a dar cuenta.

—¿Se vienen más empresas con problemas financieros como se vieron algunas en estos días?

—Es la punta del iceberg. Ojalá que rápidamente Alberto pueda encaminar la economía y todo esto sea más fácil, pero vamos a tener que refinanciar a muchas empresas.

—El Banco Central está estimulando que bajen las tasas, pero eso parece no estar pasando.

—Sí, te la bajo en el corto plazo. Pero soy un administrador de plata de terceros que cotiza en la Bolsa, no puedo decir soy un patriota con tu plata. Este banco presta a 48 meses al 60%. Parece alto, sí… Pero mis depósitos están concentrados en 50 días y doy un préstamo a 48 meses. Si puedo colocar un bono soberano que rinde CER más 25 no te puedo prestar plata a 48 meses… es así… Si el bono soberano a 48 meses achata la curva, la plata va a ser 40% rápidamente a largo plazo.

Verdes

—Uno lo ve a Martín Guzmán con 37 años y más academia que calle, y piensa que gente como usted “se lo fuma”. ¿Está verde el ministro de Economía?

—Conociste un Domingo Cavallo que asumió en 1991 e hizo una cantidad de reformas y se fue en 1996 con un poder absoluto. A ese mismo Cavallo lo llamaron en 2001 y ¿qué hizo? Nada. ¿Por qué? ¿Si era el mismo Cavallo? ¿Qué cambió? El poder político. Obviamente, tenés que tener un montón de cosas para ser ministro, pero si no tenés un paraguas político del Presidente, no podés hacer nada. Acá hay un paraguas político, más allá de que lo considere una persona idónea.

—¿Cómo ve el dólar? ¿Se atrasa?

—Hay que mirar cuánto es el tipo de cambio respecto del tipo de cambio de cuando asumió Macri en 2015. El tipo de cambio de 63 es más alto que el tipo de cambio con que Macri devaluó. Tenés un buen tipo de cambio con los 63 de hoy. Venís de devaluar 100%. Hoy tenés un muy buen tipo de cambio. No tenés problemas de tipo de cambio en la exportación.

—¿Seguirá a la inflación?

—Quiero imaginar que si la inflación anual es del 35%, tenés que devaluar la mitad en el semestre. Puede estar un poquito abajo, sí, pero no enamorarnos y que sea el ancla.

—¿El cepo se queda un rato largo?

—Mirá cuánto es la exportación de la Argentina, US$ 60 o US$ 70 mil millones y mirá esta deuda: hay cepo para rato. Tenemos que aumentar US$ 20 o US$ 30 mil millones y podemos hablar de rever esto. Argentina no tiene moneda. Fijate el problema de las provincias que se endeudaron en dólares. Habría que prohibir que las provincias se endeuden en dólares.

Contra la competencia de Mercado Libre

—¿Se la bancan con Mercado Pago y Mercado Libre, o necesitan protección?

—Es una gran mentira que la banca quiere protección. Es el sector más expuesto que ha tenido la Argentina. Hace cincuenta años compito con el Deutsche Bank y todos los bancos del mundo que vienen a invertir plata. Ningún sector tiene la apertura de competencia con el exterior como los bancos. Lo que pasó es que les dieron privilegios. Si no pagan el impuesto a los créditos y débitos bancarios me están generando una competencia desleal. Nunca le pedí al Gobierno que cerrara que vengan a competir bancos y fui 13 años presidente de la cámara. ¿Como le dieron la desgravación de impuestos que le dieron a Mercado Libre? ¿Vos me podés explicar?

—Bueno, ellos dicen que porque producen software para sus filiales y lo aplican al comercio electrónico.

—Ellos dicen. Si corresponde, corresponde. Entiendo que no corresponde. Estamos abiertos a la competencia, el tema es la desigualdad. Es como con el taxi y Uber.

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