Canal 7 presentó anoche un programa especial para mostrar todo lo malo de la elección interna del Partido Justicialista. Con un gran despliegue de móviles en distintas escuelas donde votaron los afiliados, el programa exhibió sin tapujos un direccionamiento orientado a instalar que el comicio está viciado de nulidad porque debido a escuelas que estaban cerradas, en algunos casos se improvisaron vehículos e incluso un refugio de colectivo para votar.
Aunque el exvicegobernador y expresidente del Congreso del Partido Justicialista, Guillermo Jenefes, ha dicho después de la cruenta derrota del 2015 que se retiraba de la política, lo de la “edición especial” de anoche por Canal 7 muestra que habrá sido desalojado por la voluntad popular de los sitiales de privilegio de los que gozó durante más de veinte años, pero no ha renunciado a su inveterada costumbre de manejar la política de la provincia desde la emisora de Mariano Moreno. O por lo menos de intentarlo.
En una inusual modificación de la grilla, canal 7 dejó de lado los programas pasatistas y aburridos de los domingos a la noche para dedicar casi una hora a mostrar, con lujo de detalles y comentarios tendenciosos, escuelas y mesas de votación vacías, autoridades durmiendo encima de los padrones y cuartos oscuros que se improvisaron en vehículos, y hasta en una parada de colectivo, debido a que algunas escuelas afectadas al comicio estaban cerradas.
Las imágenes de la soledad electoral de los compañeros eran coronadas en forma reiterada con reflexiones que siempre se direccionaban a lo mismo: las internas son inválidas debido a tantas “irregularidades” y los afiliados le dieron la espalda a la convocatoria (que, decimos, el fellnerismo residual con Jenefes incluido, intentó torpedear vía judicial, sin éxito).
La “edición especial” así salpimentada, dedicó además una completa cobertura de los graves incidentes ocurridos el sábado en la sede del partido, cuando una turba entró a las instalaciones, quemó urnas y documentación del comicio, y las consiguientes detenciones de los violentos por la Policía, entre los que había conspicuos fellneristas. Compañeras rodando dramáticamente por las veredas de la avenida 19 de Abril, insultando y resistiendo como gatos entre la leña para no dejarse atrapar por los uniformados, también sumaron al escenario de caos que vino como anillo al dedo.
“Elecciones así, ¿pueden ser válidas”, se preguntaba la conductora, escandalizada por tantas “irregularidades”.
La factura de esta operación de prensa tiene el indudable sello de Jenefes, quien no parece haber aprendido algo de la demoledora derrota que lo eyectó de la Legislatura y del partido de un día para el otro. Más bien muestra que desde la posición de dueño de Canal 7 que nunca dejó en todos estos años, aun está activo, puede hacer daño y está con ganas de más travesuras.
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