La salida de la Renovación Peronista y Participación Plural -merismo- de las elecciones PASO trajo consigo una serie de planteos para con el Gobierno, el intendente capitalino Raúl Jalil y la Justicia Electoral Federal. A la vez, englobaron todo lo sucedido bajo la calificación de "proscripción” para estos espacios.

El dirigente de la Renovación, Jorge Moreno, explicó el por qué la alianza Unidos Somos Catamarca "no puede participar de la próxima contienda electoral”. En síntesis, Moreno planteó que cuando se une el Gobierno provincial, el intendente de la Capital y la Justicia Electoral "para proscribir a un sector político es muy difícil superar esta adversidad”.

De acuerdo a lo que explicó, Raúl Jalil se vio involucrado "porque no sólo presionó a quienes integran Unión Popular para cambiar de apoderado y levantarlo”, sino que también "viajó a Buenos Aires para hacer gestiones ante las autoridades nacionales del partido: la apoderada nacional”.

En cuanto a la Justicia, entendió que "allana ligera y rápidamente y nos da por desistido como partido político”.

Así, planteó que "el Gobierno acosó tratando de bajarnos la estructura política de la RP y del PP y como no pudieron, apelaron a una instancia del orden legal”.

En esta línea, denunció que "el Gobierno quiso bajar nuestra oferta electoral con prebendas, nombramientos y aprietes a sus familias”.

Posteriormente, ahondó sobre la participación en el entramado del jefe comunal capitalino: "El apoderado de UP era Fernando Jalil (h) y la mesa directiva estaba constituida por quienes participaron en la conformación de la RP que hoy son todos funcionarios o empleados del municipio de la Capital. Jalil les dijo que se quedaban sin trabajo si no firmaban el cambio de apoderado del partido y lo levantaban”.

En cuanto a Luis Barrionuevo y su escisión del frente, Moreno contempló: "Es intrascendente en esto, es un ave de paso en Catamarca”. A la vez, recordó dos momentos específicos: "Cuando lo quisieron expulsar del Senado y lo quisieron meter preso estuvimos a la par y cuando tuvimos disidencias, le ganamos en la interna”.

"No he recibido ninguna llamada, ni quiero recibirla, de funcionario de la provincia”, concluyó.

Por su parte, el dirigente merista Alfredo "Pato” Carrizo arremetió contra el Gobierno: "Se dieron el trabajo de ir a ofrecer índices a compañeros que ya eran candidatos -e insistió- que repartían índices como repartían volantes para que nadie participe”.