Se entregaron 168 viviendas en la urbanización Itaembé Guazú de Posadas. Las unidades habitacionales corresponden al programa Casa Propia “Viviendas Misioneras de mampostería 2021”, en las que el Instituto Provincial de Desarrollo Habitacional (IPRODHA) fue asistido por el Gobierno provincial para poder concluir las obras de infraestructura y generales.

Los adjudicatarios recibieron las llaves y documentaciones correspondientes de manos del equipo técnico del Instituto, en un contexto de familiaridad, consolidado a través de las etapas previas a la instancia de recepción de la casa.

Con la gestión del Instituto, desde hace un año y medio aproximadamente, se dispuso que en el momento en que el adjudicatario recibe la llave de su vivienda, cuente con los servicios de luz eléctrica y agua potable. Para ello, todas las tramitaciones de las respectivas conexiones se evalúan junto al área social del IPRODHA y las entidades prestatarias: EMSA y SAMSA. En cuanto a la red de gas, el servicio público es prestado por GasNea SA.

Tipología de la vivienda

El programa “Casa Propia” cuenta con diferentes prototipos, todos de 64 metros cuadrados cubiertos, cada una compuesta por dos dormitorios, cocina-estar-comedor, baño y lavadero.

En cuanto a sus especificaciones técnicas, cada unidad posee una mampostería de ladrillos huecos, revocada. Las mamposterías que dan al exterior tienen una mejora en la aislación térmica que incluye la colocación de una plancha de polietileno de alta densidad y terminación con placa de roca de yeso, lo que deriva en un ahorro en el uso de la energía.

Además, comprende la fundación de platea de hormigón armado, cubierta de chapa de zinc con aislación térmica, pisos interiores de cerámica esmaltada, revestimiento cerámico en lavadero, baño y cocina.

También, dispone de: carpinterías exteriores con marcos de chapa y hojas de aluminio y mosquitero, con una instalación de agua fría y caliente en el baño (tanque de reserva de 850 litros) y un termotanque dual solar – eléctrico.

Respecto de las instalaciones cloacales y pluviales, cada vivienda está conectada a la red de desagües cloacales; presenta dos rejillas en el patio y cañería a cordón cuneta.

En tanto, la instalación eléctrica ostenta un circuito de iluminación, otro para tomacorrientes generales y un tercer circuito para la alimentación eléctrica del termotanque. El gas se encuentra conectado a la red pública y se provee, junto con el inmueble, de un artefacto de cocina.

Referente a las viviendas en construcción y con su preadjudicación ya sorteada, desde el IPRODHA mencionaron que –actualmente- se trabaja en la convocatoria 247, con un total de 167 familias a las que se les prevé convocar para las reuniones organizativas, en los próximos días.

Palabras de los beneficiarios

Hernán Josué Delgado es uno de los adjudicatarios que se mudó a su nueva casa en Itaembé Guazú. Es padre de dos hijos: Thiago y Aurora, y cónyuge de Cristina Da Silva. Trabaja como conductor de uno de los camiones recolectores de residuos en Posadas pero también, junto a Cristina, son emprendedores. Ella se desempeña como manicurista y proyecta hacer crecer su negocio en el barrio.

“Para nosotros es una felicidad enorme el poder tener nuestra casa propia después de tanta lucha, tanto que pasamos; porque yo vivía en un terreno que era de mi papá y mi mamá, después cuando fallecieron se armó todo un problema porque somos muchos hermanos. Tuvimos que salir a alquilar con mi familia.

Un día, entrando a Facebook, me salto la notificación que era para inscribirse y me inscribí. Después de eso tuve la dicha y la bendición, la ayuda de mi papá y mi mamá que están en el Cielo y pudimos salir sorteado entre tantas personas, para poder tener nuestra casa propia”, relató sobre el proceso que la llevó hasta el techo propio.

“Para nosotros fue una bendición, tantos años de esperar para decir ‘ahora tengo mi casa y mi familia’, podemos estar más tranquilos. Mis hijos, mi hija al llegar al barrio decían ‘allá está mi casa, mi casa’, se sentía una emoción. No hay palabra para explicar lo que uno siente al poder estar pisando tu casa propia, ni nosotros lo podemos creer todavía”, agregó.

Por su parte, Andrea Saft es oriunda de El Soberbio y hace algunos años reside en Posadas. Trabaja como empleada de comercio y decidió inscribirse al programa para mejorar la calidad de vida de ella y de su hija, Tainara. Esta última está finalizando sus estudios secundarios y se prepara para la universidad.

“Nosotras, con mi hija, nos pusimos re contentas de que nos salió (la casa). Estábamos esperando. Alquilábamos un monoambiente con ella. Nuestro proyecto es tener la huertita o poder hacer una. Capaz, más adelante, poder agrandar un poquito más para el costado o para adelante. La verdad es que estamos re contentas”, contó la mujer.

“Ahora pasamos el tiempo solo acá, en la casa, cuando vuelve del trabajo nos quedamos acá; ya no salimos a ningún lado, solo si tengo que hacer algún trámite. Estamos súper agradecidas y gracias a ustedes tenemos un techo que va a ser propio el día de mañana, cuando terminemos de pagar las cuotas. Las dos estamos súper contentas y agradecidas con el Instituto”, finalizó.