Su hija la encontró este sábado, en su casa de San Ignacio del Cerro, con signos de una muerte violenta.
La víctima, vecina del barrio San Ignacio del Cerro, fue hallada entre las 9 y las 10 de este sábado por su hija, que vive con su pareja en otra vivienda cercana, construida dentro de la misma propiedad.
La mujer fue a visitar a su madre, inquieta porque no respondía sus mensajes, y la encontró en una de las habitaciones con claros signos de una muerte violenta. Según pudo saber "DeBariloche" en la casa de la víctima no había puertas ni aberturas forzadas y en la habitación donde fue hallada había algunos objetos revueltos.
La instrucción, a cargo del juez de turno Ricardo Calcagno, descartó la posibilidad de un suicidio entre las hipótesis de investigación, pero todavía no se pudo establecer si fue una o más personas las que cometieron el asesinato, si el hecho violento estuvo asociado a un posible robo y si se trata de conocidos o de un caso "al boleo".
El asesinato de la mujer causó conmoción entre los habitantes del tranquilo barrio residencial, ubicado en la zona Oeste, a ocho kilómetros del casco urbano, sobre el faldeo inferior del Cerro Otto.
Hasta el momento, ninguno de los vecinos que prestaron testimonio en el marco de la investigación habría escuchado gritos o ladridos de los perros de la casa que dieran indicios del hecho violento que se registró en su interior.
En horas de la tarde se realizará la autopsia de rigor para determinar las causas del deceso, que en una primera evaluación se vinculó con una posible asfixia.
Efectivos de Criminalística tomaron muestras de la habitación donde fue hallada la víctima y de otros ambientes de la casa que serán peritadas para encontrar indicios que permitan identificar a el o los autores del homicidio.
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