Son 160 familias que perdieron todos sus bienes por el desborde del río que se produjo el 31 de enero de 2011.Vecinos de 13 de abril, Ceferino y Villa Angelita presentaron demandas por una reparación económica y obras.
El 31 de enero de 2011 el cauce creció como consecuencia de una tormenta y unas 400 personas de barrios cercanos como Ceferino, 13 de Abril y Villa Angelita debieron ser evacuadas.
El agua superó el metro de altura adentro de muchas casas. Unas 160 familias de la zona piden que la Justicia le ordene al Estado pagarles $40.000 a cada una por los perjuicios. “Se hizo un cálculo en base a las cosas básicas que hay en una casa, más el daño moral. Es una cifra razonable teniendo en cuenta lo que significó la inundación para quienes la vivieron”, dijo a El Tribuno Pedro Arancibia, abogado de los vecinos que iniciaron la demanda.
La denuncia apunta contra la Municipalidad de Salta, el Gobierno de la Provincia y la empresa de transporte Marozzi, que se encuentra en una de las orillas y está acusada de haber construido un terraplén que contribuyó con la crecida.
La gente también presentó un recurso de amparo para que la Justicia le imponga a la comuna la obligación de hacer todas las obras necesarias para prevenir otro desborde.
Las inundación de la ciudad de La Plata y la repercusión que tuvo a nivel nacional reavivaron los temores y los reclamos de los vecinos, más allá de las diferencias en la dimensión de la tragedia.
“Nosotros también perdimos todo, pero pareciera que no fue tan importante porque no tuvimos la ayuda que necesitábamos. Además, seguimos esperando las obras para que esto no vuelva a pasar con otra lluvia”, lamentó Ariel Mamaní, uno de los más afectados.
María Ortega, del barrio Ceferino, coincidió en que falta asistencia. “El agua me tapó, llegó por arriba del metro cincuenta de altura. Recibimos una heladera y 2000 pesos que no alcanzan para nada. Iniciamos un juicio porque es algo que se pudo haber evitado”, señaló.
La mujer también dijo que las autoridades municipales habían prometido comenzar las obras para instalar las cloacas en la zona cuando terminara el verano, pero que no cumplieron.
Ceferino, Angelita y 13 de Abril, entre otros barrios cercanos al río Arenales, están mayormente poblados por familias de escasos recursos.
La noche que desbordó el río, muchos perdieron muebles, electrodomésticos, dinero, ropa y otros bienes.
En gran parte de las casas solo pudieron hacerse arreglos básicos. Son muchos los que siguen viviendo con las manchas del barro que les entró hace más de dos años.
El 2 de abril se produjo una inundación en la ciudad de La Plata que dejó unas 60 víctimas fatales y miles de viviendas arruinadas.
Días después de la tragedia se resolvió que, para los afectados, la asignación universal por hijo se duplicaría durante tres meses y que las jubilaciones tendrían un adicional de 4.333 pesos por única vez.
También se anunció que la Nación otorgaría créditos accesibles de hasta 50.000 por persona para la refacción de inmuebles.
Los vecinos del Arenales interpusieron en 2012 la demanda por daños y perjuicios y en 2011 habían iniciado el amparo para que se hagan las obras preventivas. Los dos temas esperan una definición en la Justicia.
La comuna dice que
hubo un encauce
Desde la Municipalidad de Salta sostienen que se hicieron obras que prevendrían una nueva inundación en la zona del río Arenales pese a que los vecinos reclaman que no es así.
El secretario de Obras Públicas de la comuna, Federico Gauffín, describió que se hizo un “encauce y limpieza” de los 4 kilómetros que tiene el tramo urbano del Arenales, además de un dragado. Sin embargo, el funcionario también señaló que por ahora no se consiguió financiamiento para la solución de fondo que podría significar una canalización del río y la construcción de muros de contención.
En 2011 la gente de la zona presentó un amparo para reclamar que se hagan los trabajos necesarios para evitar un nuevo desborde.
En 2012 el juez de la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial Mario D'Jallad hizo lugar parcialmente a la demanda.
El magistrado ordenó que se monitoreara la extracción de áridos del lecho para evitar posibles inundaciones e indicó que corresponde a la Unidad Ejecutora de Recuperación y Saneamiento del Río Arenales resolver qué otros trabajos se necesitan en la zona.
Pero los vecinos apelaron para que se reconsidere el reclamo porque ellos pedían reubicar a la gente que podía estar en riesgo, hacer un reencauce y encarar obras de contención del agua. El caso ahora está en manos de la Corte de Justicia de Salta.
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